(VOVworld) – Viviendo en la zona montañosa de la provincia central Quang Tri, los compatriotas Van Kieu en la cabecera Lao Bao, enfrentan numerosas dificultades debido a la falta de capital y conocimientos científico- técnicos para desarrollar la producción y los negocios. En los últimos años, con la ayuda de la Unión Femenina local, las mujeres de esta etnia han cambiado el antiguo criterio de que ellas solo se ocupan de los quehaceres domésticos y se atreven a realizar el comercio y fomentar la economía.

La cabecera Lao Bao, Quang Tri está separada de la provincia laosiana Savanakhet por el río Se-Pon. Este lugar es el inicio de la carretera 9, corredor económico Este-Oeste que une Vietnam con los países de ASEAN, favoreciendo los negocios de las mujeres, el suministro de productos al pueblo laosiano, el desarrollo de distintos modelos económicos y el transporte de mercancías. Nguyen Thi Thu Hien, vicepresidenta de la Unión de Mujeres de Lao Bao, dio a conocer: “Esta cabecera tiene 3 villorrios, Khe Tang, Khe Da y Khe Tuc, donde viven principalmente los Van Kieu. La vida de las mujeres encuentra numerosas dificultades en comparación con el nivel común de la cabecera, pero en comparación con el pasado ha mejorado mucho, sobre todo en Khe Da y Khe Tang. Ellas han invertido en el comercio y fomentado numerosos modelos económicos y no solo trabajan en el campo como antes. Por ejemplo, la brigada de construcion de carretillas de Khe Tang funciona muy eficazmente, generando empleos e ingresos para muchas mujeres, elevando sus niveles de vida.”

Anteriormente Ho Thi Nep solo labraba en las pendientes de las montañas, por lo tanto, la economía familiar enfrentaba vicisitudes. Ahora, su vida ha mejorado mucho. Nep dijo: “Anteriormente trabajaba duramente en el campo. Empecé a tirar de la carretilla en 2006. Al principio, transportaba productos como jornalera y los contratistas me pagaban enseguida. Después de un tiempo, con el dinero acumulado hice una carretilla. Nuestra brigada que tiene numerosos parroquianos, puede fabricar 3 o 4 carretillas y las que cuentan con pocos clientes solo hacen un carro de 2 ruedas.”

Hacen negocios e intercambian experiencias en el cultivo y la cría para garantizar ingresos estables para su familia

Ho Thi Ta Doa acumula 5 años de experiencia en el abastecimiento de víveres al país amigo Laos. Al principio, realizaba un intercambio pequeño. Poco a poco, con la confianza de los laosianos, les suministra cada día más mercancías. Actualmente vende principalmente productos acuícolas, carne, legumbres y arroz. “Al iniciar el comercio era muy pobre y no tenía nada. Los cultivos estaban destruidos por los jabalíes y cuando enfermaba no tenía dinero para comprar medicinas. Posteriormente me atreví a comprar hortalizas y pescados en Lao Bao, para vender a los laosianos. En general, comercio cualquier producto que genere ganancias”, dijo Doa.

Ahora, su negocio es más favorable, ya que todos los pedidos se hacen por medio del teléfono y no debe ir diariamente a Laos. Además del comercio, Doa desarrolla la cría. “Era muy pobre, no tenía ninguna propiedad porque mis padres murieron muy temprano y vivía con unos parientes. Al principio, con poco capital compré una pareja de cerdos. Después de venderlos compré cabras y bueyes.”

En el villorrio Khe Da, 55 familias tienen casas de ladrillos sólidas y los aldeanos ya no queman bosques para cultivar, sino que invierten en el cultivo intensivo del arroz de agua y otras plantas de uso industrial. Las mujeres Van Kieu comparten experiencias en la producción y negocios. Sin embargo, para cambiar su enfoque se necesita un largo proceso de propaganda de la Unión de Mujeres de la cabecera Lao Bao. Nguyen Thi Thu Hien, vicepresidenta de la organización femenina local, dejó saber: “Además de movilizar a las féminas a fomentar la economía, la propaganda les ayuda a confiar más en el contacto con el exterior y en la vida. Sus conocimientos sobre la sociedad, lineamientos y políticas del Estado, atención y educación de sus hijos se han elevado. Antes no tenían información y solo se sentían complacidas de sí mismas. Ahora, comprenden sus derechos y deberes, y se muestran más audaces. Anteriormente no sabían comerciar, se quedaban en la casa, dependían de sus esposos y realizaban cultivos en las pendientes de las montañas. Su participación en las actividades sociales era escasa.”

La Unión de Mujeres de Lao Bao no solo orienta a las mujeres Van Kieu a realizar cultivos en los huertos, seleccionar el desarrollo económico conveniente y estabilizar la vida, sino que las moviliza a practicar el ahorro según el ejemplo moral del presidente Ho Chi Minh. Los modelos como “Trozo de bambú de ahorro” y “Jarra de arroz de ahorro” están mostrando su resultado, ayudando a cientos de mujeres de Lao Bao a liberarse de la pobreza.