(VOVworld) – Las provincias montañosas en el Norte de Vietnam cuentan con ricos recursos naturales como bosques, energía hidráulica, tierras, minerales y flora y fauna. En virtud del programa nacional de nuevo campo, numerosos distritos han establecido el modelo de cultivo extensivo, unido a la aplicación de nuevas semillas, que contribuyen a la reducción de la pobreza y la eliminación del hambre.
En comparación con las llanuras, la producción arrocera para su comercialización acorde con el proyecto de cultivo extensivo resulta más difícil, debido a la variable topografía que obstaculiza el abastecimiento de agua. Fue también arduo cambiar los hábitos de cultivo de los étnicos. Esta realidad evidenció la necesidad de la construcción de arrozales extensos para modernizar la vida del pueblo.
El distrito de Luc Yen, provincia de Yen Bai, ha desplegado este modelo en 6 comarcas en una superficie de más de 185 hectáreas. Gracias a la aplicación de las normas técnicas, se obtuvo un rendimiento de 327 kilogramos en 366 metros, un 13% más con respecto al cultivo tradicional. El tiempo de cosecha se reduce, favoreciendo los preparativos para las temporadas posteriores. Hoang Van Vui, secretario del Comité Partidista local, dijo: “El nuevo modelo ha potenciado la eficiencia de la producción arrocera y también el nivel de los agricultores. Estamos muy satisfechos”.
En pos de movilizar la participación masiva, la municipalidad local ha celebrado reuniones para dar instrucciones y consultar a los lugareños. En la primera fase, los campesinos reciben semillas a precios subsidiados, aprenden tecnológicas y cómo prevenir el daño causado por insectos. Se trata de un cambio absoluto en comparación con las costumbres tradicionales. Con la ayuda de las instancias pertinentes, los agricultores han alcanzado resultados alentadores.
El distrito de Van Chan, el mayor granero arrocero en Yen Bai, ha aplicado el modelo de gran campo con vistas a suministrar el arroz para mercados potenciales. Los pobladores han transformado con éxito la forma de cultivar conforme a las condiciones locales. Numerosos de ellos como Phu Nham y Son A cultivan la misma semilla arrocera y aplican las medidas técnicas en pos de elevar la calidad del producto, reducir los gastos y proteger el medio ambiente. De acuerdo con Hoang Tuan Van, vicepresidente del Comité Popular de Phu Nham, el rendimiento medio en los arrozales locales representa 7 toneladas por hectárea. “Por diferentes vías de divulgación, nos proponemos elevar la conciencia de los campesinos sobre la producción del arroz como mercancía. Gracias a las experiencias recogidas son conscientes de las semillas adecuadas a las condiciones locales para garantizar la calidad del grano”.
Las localidades en la provincia de Yen Bai coordinaron con científicos e institutos investigadores en busca de buenas semillas del arroz. Como resultado, los géneros del arroz de Yen Bai reafirmaron su marca en el mercado doméstico. Sin embargo, debido a encontrarse r lejos de los grandes mercados, Yen Bai enfrenta dificultades en la búsqueda de inversionistas y el mantenimiento de los productos cosechados.
La construcción de gran campo en las zonas montañosas se considera vital para cumplir los acápites del proyecto enfilado a modernizar la fisonomía rural en el área más llena de dificultades en el país.