Según datos de la Oficina General de Estadística de Vietnam, en los primeros 9 meses de 2017, la economía nacional presenta señales alentadoras, reflejádas en la alta subida del Producto Interno Bruto (PIB), la mejora del entorno de negocios, y la eficaz reestructuración agrícola, forestal y acuífera. La misma fuente también revela que el PIB de Vietnam en el tercer trimestre aumentó el 7,46 por ciento, un nivel récord en los últimos 10 años.

La especialista en economía Vu Kim Chi dijo al respecto:  “Se han pronosticado buenas perspectivas de desarrollo económico para Vietnam en 2017, gracias al despliegue de la resolución 19 del Gobierno sobre el mejoramiento del ambiente comercial. Especialmente, la cooperación entre las localidades ha impulsado la motivación para elevar la calidad del entorno inversionista nacional, lo que es un factor clave para mejorar la competitividad de la economía”.

Foto de ilustración (Fuente: kinhtedothi.vn)

En el Informe de Competitividad Global 2017-2018, la clasificación de la competitividad de Vietnam subió 5 niveles, de 4,31 a 4,47 puntos en una escala de 7, lo que significa un aumento de un total de 20 niveles en los últimos 5 años. Este documento notifica que el país indochino ha logrado avances notables en cuanto a la adaptación a la tecnología y la eficiencia del mercado laboral. Muchos expertos estimaron que dichos logros se deben a las políticas de renovación económica interna y de integración internacional.

Nguyen Anh Duong, especialista del Instituto Central de Administración Económica, dijo: “Los cambios en la nueva coyuntura requieren políticas correspondientes sobre renovación, planificación, y orientación de la reestructuración económica para una integración internacional eficiente en los próximos tiempos. Se trata de una premisa fundamental para mantener una economía estable”.

La firma de varios tratados de libre comercio (TLC) ha sido muy importante en la elevación de la competitividad de los productos vietnamitas. Concretamente, a través de la reducción y eliminación de las barreras arancelarias y no arancelarias, será más fácil introducir mercancías vietnamitas en los mercados de sus socios. En este contexto, el Gobierno vietnamita continuará estimulando la demanda doméstica, mejorando la competitividad de los bienes nacionales e impulsando el crecimiento de la exportación.   Todos estos esfuerzos están destinados a aumentar la competitividad de su economía, además de promocionar el prestigio del país en el plano internacional.