(VOVWORLD) - Una serie de países occidentales decidieron en los últimos días suspender temporalmente la financiación de la Agencia para la Reconstrucción y el Socorro para los Refugiados de Palestina (UNRWA), el principal grupo encargado de proporcionar ayuda vital en la Franja de Gaza. Tal decisión provoca una profunda preocupación de que la crisis humanitaria en este territorio se agrave.
El Ministerio de Asuntos Exteriores de Austria anunció el 29 de enero la suspensión temporal de toda la financiación del país a la UNRWA. Este es el último país que se suma a la lista de al menos 9 naciones, incluidas donantes importantes como Estados Unidos, Alemania e Italia, que dejarán de apoyar a esta entidad de la ONU.
 Palestinos haciendo colas para recibir la ayuda de la UNRWA en Khan Younis, en el sur de la Franja de Gaza, el 29 de noviembre de 2023. (Foto: Reuters) |
Acusaciones por parte de Israel
El corte temporal de la ayuda se produjo después de que el Gobierno israelí publicara la semana pasada información acusando a varios empleados de la entidad de estar involucrados en un ataque de las fuerzas del Movimiento Islámico Hamás que mató a más de 1.200 civiles y soldados israelíes el 7 de octubre del año pasado. Fue el evento que marcó el inicio del feroz conflicto actual en la Franja de Gaza.
Junto a eso, el ministro de Asuntos Exteriores israelí, Israel Katz, pidió reemplazar la agencia de la ONU por otras agencias dedicadas a la paz y el desarrollo, e instó a los países aliados a suspender temporalmente su financiación. Estas acusaciones de Tel Aviv provocaron inmediatamente una gran controversia en la comunidad internacional. Estados Unidos, el mayor aliado del país hebreo, pidió una investigación exhaustiva y dijo que no descarta aplicar medidas adicionales, además de suspender la financiación a la UNRWA, en función de los resultados de la investigación. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kirby, declaró: “Queremos que esta investigación se lleve a cabo de forma completa, exhaustiva y transparente para identificar quién es el responsable”.
Compartiendo la misma opinión, Alemania también expresó su profunda preocupación por las acusaciones israelíes y acogió con agrado la investigación sobre el incidente. Sin embargo, Alemania y varios otros países dejaron abierta la posibilidad de reanudar la asistencia después de que la propia UNRWA pidió realizar una investigación al respecto. Mientras tanto, aunque no se oponen a la apertura de una investigación internacional independiente y transparente, diversos países árabes expresaron su descontento ante la reacción de los países occidentales y su decisión de cortar la ayuda humanitaria. El canciller egipcio, Sameh Shoukry, dijo lo siguiente: “De hecho, estamos sorprendidos por las decisiones tomadas con respecto a la UNRWA y las acusaciones retóricas contra su personal. ¿Por qué no se utilizan declaraciones similares para hablar de la muerte de más de 26.000 civiles inocentes en Gaza, en su mayoría mujeres y niños?”.
A su vez, el jefe de la diplomacia de Arabia Saudita, el príncipe Faisal bin Farhan, dijo que el incidente relativo a la UNRWA demuestra que aún no se ha aplicado plenamente el derecho internacional humanitario en la Franja de Gaza. Por lo tanto, Arabia Saudita pide a la comunidad internacional que aúne fuerzas para resolver la situación actual.
Riesgo de hambruna en Gaza
Los observadores indicaron que las acusaciones contra la UNRWA aumentan el riesgo de que empeore la hambruna en la Franja de Gaza. Jan Egeland, secretario general del Consejo Noruego para los Refugiados, dijo que los niños gazatíes serán las principales víctimas de la controversia actual y pidió a las naciones que no les provocaran hambre a causa de los pecados de otros.
 Refugiados palestinos reciben ayuda alimentaria de la UNRWA en la Franja de Gaza, el 28 de enero de 2024. (Foto: AFP) |
Mientras tanto, el jefe de la UNRWA, Philippe Lazzarini, consideró la suspensión de la financiación por parte de los países donantes como un nuevo “castigo colectivo” dirigido a los residentes de Gaza y dijo que la medida amenaza las operaciones de ayuda humanitaria de su entidad en toda la región. Al respecto, el secretario general de la ONU, António Guterres, afirmó que después de las acusaciones hechas por Israel, la UNRWA identificó a 9 de las 12 personas involucradas en el incidente y las despidió inmediatamente. De las 3 personas restantes, dijo, una murió y actualmente, se desconoce el paradero de las otras dos. El jefe de la ONU también confirmó la determinación de investigar el incidente hasta el final, pero también dijo que detener el financiamiento a la UNRWA pondría en peligro a más de dos millones de habitantes de Gaza y a decenas de miles de empleados de la agencia. El primer ministro palestino, Mohammad Shtayyeh, también destacó la necesidad de esperar los resultados de la investigación y pidió a los países que reanuden rápidamente la asistencia: “La suspensión de la financiación se decide en un momento extremadamente difícil, cuando la Corte Internacional de Justicia acaba de pedir un aumento inmediato de la ayuda internacional a la Franja de Gaza, y la UNRWA se encarga de proporcionar soporte a 1,7 millones de palestinos en Gaza”.
Según cifras de la UNRWA, los países que anunciaron la suspensión del financiamiento a la agencia contribuyeron con hasta el 70% de su presupuesto operativo el año pasado. Por lo tanto, esta decisión podría provocar el colapso de esta agencia en cualquier momento. Desde que estalló el conflicto entre Hamás e Israel el 7 de octubre del año pasado, la agencia de la ONU ha ayudado a alrededor de dos tercios de los 2,3 millones de habitantes de Gaza y ha desempeñado un papel clave en los esfuerzos de entrega de ayuda en este territorio. Mientras tanto, según datos publicados por el Programa Mundial de Alimentos (PMA) el 23 de enero, más de medio millón de personas en Gaza enfrentan niveles de inseguridad alimentaria catastróficos y el riesgo de hambruna aumenta cada día.