En el proceso con vistas a una mayor integración internacional, Vietnam sigue enfrentando muchos desafíos. Por esta razón, el crecimiento sólido de la economía privada, en particular el aumento de las inversiones de este sector, es una necesidad urgente y vital para el país indochino en lo adelante.

El sector privado es uno de los promotores importantes de la economía vietnamia

El sector privado y su aporte a la economía nacional

A más de 30 años del inicio del proceso Doi Moi (Renovación), el sector privado vietnamita ha experimentado un incremento tanto en cantidad como en calidad. De 55 mil 200 empresas privadas en 2002, en 2015 se registraron más de 495 mil, las cuales generaron empleos para el 85% de los trabajadores de todo el país. Especialmente, la fundación y el desarrollo de varias grandes corporaciones en las esferas de la construcción, aviación, producción industrial y agricultura, entre otras, han creado una nueva cara para la economía vietnamita, brindado beneficios al pueblo y aportado significativamente al aumento del Producto Interno Bruto. Al mismo tiempo, el empresariado nacional muestra una mayor cualificación. Respecto al tema, el ex ministro de Comercio Truong Dinh Tuyen valoró: "Las empresas privadas tienen diversas ventajas. En primer lugar, está la abundante mano de obra joven, con mucho interés en aprender y una gran capacidad de adaptación y de forma rápida. En segundo, cuentan con un alto ritmo de crecimiento y así, con una estrategia y una visión a largo plazo, podrán incrementar su tamaño. Por ello, el gobierno las considera un motor impulsor de la economía”.

Promover el emprendimiento es una tarea clave del gobierno vietnamita en lo adelante

Crear oportunidades para que el desarrollo del sector privado

Aunque no se puede negar el potencial de esta área, en realidad siguen existiendo deficiencias. Cerca del 97% de las empresas privadas son pequeñas y ultra-pequeñas, con una capacidad tecnológica y financiera y una producción limitadas, así como una baja participación en las cadenas de valores del país y el mundo. En el periodo 2007-2015, la tasa media de quiebras alcanzó el 45%. Nguyen Duc Tho, presidente de la Junta Directiva y director general del Grupo An Tin, expresó:  "En muchos países, se encuentran a 100 empresarios por cada mil personas. No obstante, en Vietnam esta proporción es de 6 por cada mil habitantes. En medio de la actual integración internacional, debemos estimular el emprendimiento. Los mecanismos y las políticas necesitan ser cercanas y favorables al sector privado. Por ejemplo, podemos renovar los procedimientos públicos, resolver los problemas en el acceso a la tierra, capitales y tecnología e impulsar la formación de los recursos humanos”. 

Por su parte, el economista Dao Xuan Sam, decano del Departamento de Administración Económica de la Academia Nacional de Política Ho Chi Minh, destacó la importancia del establecimiento de instituciones mercantiles sincrónicas, a fin de ampliar el sector privado vietnamita. “El Partido y el Estado fijan metas muy altas para el desarrollo empresarial. El éxito del trabajo se deberá a la innovación de las políticas, con el propósito de estimular a los pobladores a crear sus propios negocios. Para desarrollar el sector privado, es necesario fortalecer la capitalización de las sociedades públicas y la competitividad, porque la subvención gubernamental no existe en la economía mercantil”, dijo Sam.

Vietnam se propone alcanzar un millón de empresas privadas para 2020. No es nada fácil porque solo ha logrado cumplir la mitad de la dicha cifra durante los últimos 30 años de la Renovación. Por eso, el país indochino definitivamente está afrontando muchos obstáculos que requieren una evaluación más profunda del sector privado y su papel, así como orientaciones y soluciones más concretas, encaminadas a convertirlo en un motor de la economía nacional.