Según los resultados oficiales anunciados por el Ministerio del Interior de Francia la tarde del 11 de abril, el presidente en ejercicio Emmanuel Macron se hizo con un 27,85% de los votos, mientras que la candidata ultraderechista Marine Le Pen quedó segunda, con el 23,15% de los sufragios. Con este resultado, Macron y Le Pen pasarán a la segunda ronda de elecciones previstas para el 24 de abril, volviendo a dibujar el mismo escenario que en la anterior cita presidencial de 2017.

El presidente francés, Emmanuel Macron y su esposa (i), habla con una ciudadana antes de ejercer su derecho a voto en la primera vuelta electoral del 10 de abril. (Foto: AFP)

Una carrera reñida por la presidencia

Con una diferencia de cinco puntos porcentuales entre los dos aspirantes, se puede afirmar que los resultados de la segunda vuelta de las elecciones presidenciales francesas se consideran mucho más impredecibles que las de 2017. En los comicios hace cinco años, el centrista Emmanuel Macron ganó fácilmente a su máxima contendiente Le Pen con una tasa de apoyo del 66 % frente al 34%.

Ahora en la contienda de 2022, la votación podría ser más reñida que la última vez que la pareja se enfrentó cara a cara en 2017. Según una serie de encuestas realizadas por el Instituto Ifop-Fiducial (Francia), Macron puede ganar a Le Pen por 51-49%, con un margen de error del 3%. En tanto, algunos sondeos separados de otras dos organizaciones Ipsos-Sopra Steria y OpinionWay, pronostican que Macron ganará con el 54 % de los votos frente al 46 % de Le Pen.

En consecuencia, los analistas dicen que los resultados de las próximas votaciones sólo se pueden predecir parcialmente en función de los resultados del debate, que se transmitirá en vivo por la televisión nacional francesa el próximo 20 de abril. Sin embargo, los resultados definitivos, por supuesto, todavía tendrán que esperar a que se celebre la votación cuatro días después.

Impactos y desafíos

De hecho, las elecciones a la presidencia de Francia 2022 han recibido una atención especial de la opinión pública europea e internacional debido a que sus resultados pueden crear cambios significativos en la política exterior de Francia y de Europa. Antes de la retirada del Reino Unido de la Unión Europea (Brexit), Francia, junto con Alemania y Gran Bretaña, formaban un trío de locomotoras de la Unión Europea. Después de que Londres abandonara oficialmente el bloque comunitario a principios de 2021, Alemania y Francia desempeñan el papel de liderazgo de la agrupación.

En declaraciones emitidas en su campaña electoral, la aspirante de la Agrupación Nacional Marine Le Pen afirmó la voluntad de reformar radicalmente la Unión Europea, y al tiempo que expresó la intención de retirar a Francia del Mando Conjunto de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), liderado por Estados Unidos.

Por su parte, el presidente Macron deseó que “Francia apuesta por una Europa más fuerte, que siga aliándose con las democracias de todo el mundo para defenderse”. Sin embargo, según analistas, quienquiera que gane estos comicios también enfrenta grandes desafíos tanto internos como externos.

En términos de asuntos exteriores, el principal desafío radica en cómo manejar la complicada relación actual entre Rusia y las principales entidades mundiales como la Unión Europea, Estados Unidos y China, en el contexto de que la crisis en Ucrania ha tenido un gran impacto en diversas esferas de la vida social de Europa.