(VOVworld) - La guerra química llevada a cabo por Estados Unidos desde l961 hasta l971, dejó graves consecuencias para el medio ambiente y la salud de los vietnamitas. Según estadísticas incompletas, más de 4,8 millones de vietnamitas fueron afectados por el agente naranja dioxina  y numerosos  de ellos todavía sufren dolores físicos y espirituales duraderos. El dolor causado por el agente naranja/dioxina debe ser paliado.

Inmediatamente después de la conclusión de la guerra, el Partido y el Estado vietnamita prestaron atención a las víctimas de dicho producto tóxico. La Asamblea Nacional vietnamita aprobó un decreto en el cual estipuló claramente que los hijos de los participantes en la anterior resistencia contagiados por el agente dioxina  pueden beneficiarse de preferencias del Estado. Los gastos permanentes para una víctima superan los 2 millones de dong al mes. Además, el Gobierno aplica una política prioritaria para sus hijos en la selección de trabajadores, concesión de becas o exención de gastos de estudio a fin de paliar sus dolores. Además de la política del Estado, numerosas organizaciones sociales e individuos también realizaron  acciones positivas por el mismo fin.  Hasta la fecha, la Asociación de víctimas vietnamitas del agente naranja/dioxina ha recibido unos l60 mil millones de dong de ayuda (unos 8 millones de dólares). El coronel general Nguyen Van Rinh, presidente de dicha institución informó: "Desde 20ll hasta la fecha, nuestra asociación ha movilizado cientos de miles de millones de dong tanto del nivel central como de las localidades para construir  centros seminternados, reparar y edificar casas para las víctimas, así como otorgar becas a las personas que no tienen condiciones materiales para  estudio. Asimismo les ofrecieron dinero para buscar empleos y curarse".

Junto con las políticas preferenciales del Gabinete, el movimiento de ayuda de organizaciones e individuos en el país y en el extranjero, en especial de vietnamitas en ultramar fue impulsado. El señor Rinh subrayó: “Desde 20ll hasta la fecha, nuestra institución ha recibido objetos y dinero estimados en cientos de miles de millones de dong. Estos fueron grandes aportes en comparación con los años anteriores. El número de personas que apoyaron aumentó, también en especial las organizaciones internacionales prestaron atención a este movimiento. Por ejemplo, la Asociación de Amistad Reino Unido-Vietnam ha movilizado al primer ministro y a los legisladores a firmar en los libros escritos por ella misma para ayudar a las víctimas vietnamitas con el dinero logrado de la venta de estas obras”. 

Las actividades de apoyo a las víctimas de la dioxina se realizan
con regularidad en todo el país

Además del movimiento de ayuda, la lucha por la justicia de las víctimas vietnamitas llamó mucho la atención de organizaciones sociales. Desde el momento en que la Asociación de víctimas vietnamitas del agente naranja/dioxina presentó su pleito contra las compañías químicas estadounidenses por haber producido dichos tóxicos para que las tropas norteamericanas los usaran en la guerra en Vietnam en 2004 hasta la fecha, la opinión pública internacional lo ha apoyado fuertemente. El presidente de dicha  asociación agregó:“Nuestro pleito ha recibido un fuerte respaldo de la opinión pública internacional, especialmente la Asociación Internacional de Juristas Democráticos celebró un juicio del pueblo para juzgar a las compañías químicas estadounidenses. Ellos denunciaron y responsabilizaron al Gobierno norteamericano y las compañías químicas estadounidenses con la indemnización a las víctimas vietnamitas del agente naranja, saneamiento del medio ambiente y en ayudarles a mejorar sus vidas. Considero que estas actividades tienen un alto valor humanitario  y la opinión publica internacional  ha defendido los intereses de las víctimas”.

Tras los esfuerzos en la lucha de la Asociación de víctimas vietnamitas del agente naranja/dioxina y el movimiento de apoyo en Vietnam y en el mundo, el gobierno estadounidense ha comenzado a ofrecer la cooperación más sustancial en la solución del problema del agente naranja/dioxina en Vietnam. También ha contribuido con el país indochino en construir bases materiales para el  servicio de tratamiento médico para esas personas y en desintoxicar el medio ambiente en los lugares contaminados. Los esfuerzos de la comunidad social, organizaciones e individuos en el país y en el extranjero, pueblos y gobiernos de distintos países aliviarán los dolores de las  víctimas, ayudándoles a esforzarse en la vida.