(VOVWORLD) - A un mes y medio del regreso de los talibanes al poder, Afganistán aún enfrenta numerosos retos tanto en seguridad como en bienestar social. En este contexto, la comunidad internacional sigue haciendo muchos esfuerzos para ayudar a la población del país de Asia meridional a superar las dificultades.
Según evaluó la ONU, la mayor prioridad para la comunidad internacional en su labor de ayudar a Afganistán a superar la actual crisis, es prevenir un desastre humanitario y la posibilidad de un colapso del sistema financiero. Además, es necesario seguir ejerciendo presión para obligar a los talibanes a llevar a cabo la reconciliación nacional y garantizar los derechos humanos, especialmente a favor de las mujeres.
Prevenir catástrofes humanitarias y el colapso del sistema financiero
Niños refugiados en el cruce fronterizo entre Afganistán y Pakistán, en Chaman, al suroeste de Pakistán, el 27 de agosto de 2021. (Foto: Xinhua/VNA) |
El último análisis de las Naciones Unidas muestra que la escasez de alimentos en Afganistán se está volviendo cada vez más grave. El Fondo de Población de la ONU (FPNU) advierte que alrededor de un tercio de los 33 millones de habitantes afganos se enfrentan al hambre. Según el Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas (PMA), solo el 5 % de la población de ese país tiene tres comidas de calidad diarias. Mientras que, durante la última quincena, la mitad de la nación no ha comido ni una sola comida al día.
Además, su sistema nacional de salud también se encuentra en un estado de grave sobrecarga y escasez. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), cientos de miles de afganos vulnerables no pueden acceder a los servicios sanitarios. En adición, el tesoro nacional de Afganistán también está casi vacío y el sistema financiero en peligro de inminente colapso.
Ante esta alarmante situación, la comunidad internacional mantiene los esfuerzos para ayudar a los afganos a superar la actual crisis. La ONU decidió deducir 45 millones de dólares del Fondo de Respuesta de Emergencia de las Naciones Unidas (CERF) para ayudar a Afganistán a hacer frente a la escasez de medicamentos, suministros médicos y combustible. Entretanto, la Unión Europea (UE) se comprometió a brindar una mayor asistencia. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, afirmó que, en el futuro inmediato, el bloque proporcionará una ayuda humanitaria adicional de 100 millones de euros para el pueblo afgano. Por su parte, la administración estadounidense también ha autorizado algunas transacciones con los talibanes para allanar el camino para que la ayuda llegue a Afganistán. Washington congela actualmente alrededor de 9 mil millones de dólares de Kabul.
Organizaciones internacionales como la OMS, el PMA y el FPNU están haciendo campañas activas para obtener apoyo financiero, alimentos, medicinas y suministros médicos con el objetivo de ayudar a los afganos a superar las dificultades, especialmente en preparación para el duro invierno que se avecina.
Promover la reconciliación y garantizar los derechos de las mujeres.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen. (Foto: VNA) |
Junto con la ayuda humanitaria, la comunidad internacional se está enfocando en promover el proceso de reconciliación y garantizar los derechos humanos en Afganistán, especialmente a favor de las mujeres y las niñas.
Existen evidencias del incumplimiento de los compromisos internacionales por parte del gobierno talibán en cuanto a la reconciliación nacional y el respeto al derecho de la mujer. La composición del gabinete interino declarada recientemente por los talibanes no tiene representantes fuera de estas mismas fuerzas ni tiene ningún miembro del sector femenino. El 28 de septiembre, los talibanes anunciaron que habían adoptado una Constitución provisional de 1964, que incluía el empoderamiento de la mujer. Sin embargo, el ministro de Justicia, Abdul Hakim Sharaee, advirtió de inmediato que se eliminaría cualquier punto de la constitución que entrase en conflicto con la sharía o la ley islámica y las reglas de los talibanes.
En un comunicado emitido el 26 de septiembre, el canciller italiano Luigi Di Maio subrayó que el gobierno talibán no debe ser reconocido porque entre los ministros hay 17 terroristas, y porque los derechos humanos de mujeres y niños son violados constantemente. Italia preside el Grupo de las principales economías desarrolladas y emergentes (G20) y planea celebrar una cumbre especial sobre Afganistán en septiembre. El 25 del presente mes, el ministro de Relaciones Exteriores de Rusia, Sergei Lavrov, también confirmó que no se había considerado el reconocimiento internacional para los talibanes.
Según el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres, y líderes de muchos países, en el contexto actual, la cuestión del reconocimiento internacional es la única forma de presionar a los talibanes para lograr la reconciliación y el respeto de los derechos básicos, especialmente los en beneficio de las mujeres.