(VOVworld) – Tras recibir 360 de los 652 votos emitidos por el Parlamento birmano, Htin Kyaw, amigo asesor de la Premio Nobel, Aung San Suu Kyi, se convirtió en el primer jefe de Estado civil de ese país asiático desde la década de 1960. Tras medio siglo de gobiernos designados por el Ejército, la nueva administración elegida democráticamente por el pueblo hará más abierto el camino de reformas de Myanmar.
Htin Kyaw, de la Liga Nacional para la Democracia fue elegido por la Asamblea birmana como presidente el 15 de marzo pasado, y según lo previsto, el mandatario electo asumirá su cargo el próximo primero de abril. También se designaron los vicepresidentes y ministros, completando el nuevo sistema político de Myanmar. De esta manera, la Liga Nacional para la Democracia tomará la batuta del gabinete. Se trata de un momento histórico y un gran avance de Myanmar tras más de medio siglo, para estabilizar la situación política y económica del país.
Htin Kyat, presidente elegido de Myanmar y Aung San Suu Kyi, líder de la Liga Nacional para la Democracia
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Nueva esperanza
Antes de salir triunfante de la contienda electoral del 15 de marzo de 2016, Htin Kyaw se impuso ante Sai Mauk Kham del Partido para la Unión, Solidaridad y Desarrollo en las votaciones de la Cámara de Representantes el día 11. Tras la victoria final de Kyaw, amigo confidente de Suu Kyi, quien tiene la mayor influencia en la vida política de Myanmar, analistas estimaron que el nuevo presidente impulsará la reforma del país, concentrándose en la construcción de infraestructuras y la lucha anti corrupción en aras de un gobierno transparente y una alianza federal. Por otra parte, en redes sociales muchos birmanos compartieron estatus llenos de emoción tales como “Bienvenido al Señor Presidente” o “Amamos a nuestro Presidente Htin Kyaw”. Han expresado el deseo de que el nuevo mandatario traiga paz a las zonas que aún presentan enfrentamientos tributarios, y reconciliación nacional, además de mejorar la calidad de vida de la población.
Retos nada pequeños
A pesar de recibir gran apoyo y confianza del pueblo birmano, el nuevo gobierno de Myanmar enfrentará numerosos retos en el futuro, de acuerdo con analistas políticos. Ante todo, debe buscar la solución a los conflictos sectarios y forjar la solidaridad entre los partidos políticos y las fuerzas armadas, tarea nada fácil. Según la Constitución de Myanmar, la Junta Militar tiene un desempeño notable al ser quien nomina a titulares de tres carteras importantes: Defensa, Interior y Seguridad Fronteriza. Por esta razón, las relaciones con los generales del Ejército será la gran prioridad de Kyaw, pues decidirán el éxito o no de los esfuerzos para la democracia, la reconciliación y la estabilidad en esa nación asiática.
La segunda misión importante del gobierno civil de Htin Kyaw es mejorar la vida de la población y desarrollar la economía nacional. En su primer discurso pronunciado después de ser elegido, Kyaw declaró que fundará un verdadero aparato de administración pública al servicio de la ciudadanía. Esta es la aspiración de los birmanos cuando la economía nacional y la vida de la mayoría del pueblo no han mejorado. Actualmente Myanmar es uno de los países más pobres de Asia con un tercio de su población en situación de pobreza.
Continuo proceso reformista
Desde la reconquista de la independencia en 1948, Myanmar se vio hundido en incidentes políticos y conflictos sectarios. El país experimentó profundos cambios políticos y económicos con la subida al poder el presidente U Thein Sein. Durante cuatro años bajo la gobernación de Thein Sein, se desplegó una serie de reformas para las grandes transformaciones de este país de más de 52 millones de habitantes. Además de los éxitos económicos, la administración democrática de Thein Sein creó un viraje histórico en el proceso de pacificación. Por primera vez desde la Proclamación de la Independencia en 1948, el gobierno y 8 de los 15 grupos étnicos armados, firmaron un acuerdo nacional de alto al fuego en octubre de 2015, para poner fin a más de 60 años de conflictos internos, y abrir camino a la paz, en bien de la estabilidad y el desarrollo de la nación.
Con la elección de Htin Kyaw como presidente del país, los birmanos y la comunidad internacional tienen muchas razones para creer en el progreso de las reformas en Myanmar en el futuro. Tal como declaró el ex presidente U Thein Sein, el proceso reformista seguirá la tendencia principal de cualquier partido que gane el poder, ya que es el único camino para que el país mejore la vida de su pueblo y garantice la seguridad social de modo sostenible, además de restaurar y elevar la posición nacional en la palestra internacional en los próximos decenios.