(VOVWORLD) - Más allá de las preocupaciones de los analistas, la situación en Oriente Medio en 2021 ha sido inestable y plagada de desafíos. En líneas generales, el panorama de la región el año pasado no fue muy halagüeño, pero cuenta con los cimientos necesarios para crecer en el futuro.
Derrumbe de casas en la ciudad de Khan Ypunis, Franja de Gaza, tras bombardeos israelíes producidos el 19 de mayo de 2021. (Foto: Xinhua/VNA) |
En la última reunión de 2021 sobre la situación en la región de Oriente Medio celebrada el 21 de diciembre, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas evaluó que la zona sigue siendo inestable. Entonces, se debatieron las tensiones en Palestina, una de las piedras angulares del proceso de paz en Oriente Medio. Si hay dos palabras que definen la situación de la región el año pasado, estas son: "inestabilidad" y "tensión", a pesar de los muchos esfuerzos de la comunidad internacional.
Quedan puntos candentes
Cifras de la ONU muestran que en 2021 la violencia aumentó en Palestina, y, especialmente en Cisjordania, lo que provocó que el número de muertos en Palestina se triplicara respecto a 2020. Los datos son concluyentes: el conflicto palestino-israelí, epicentro del proceso de paz en Medio Oriente, sigue siendo complejo. La paz entre palestinos e israelíes sigue siendo el mismo sueño incumplido que lleva siendo desde hace décadas.
Sin embargo, no sólo el proceso de paz palestino-israelí está en punto muerto. Hay otros temas candentes en Oriente Medio como la guerra civil en Siria, los conflictos en Yemen, la inestabilidad en Irak y la amenaza nuclear de Irán, que siguen igualmente estancados. La guerra en Siria está a punto de entrar en su undécimo año, y las partes involucradas siguen sin lograr un acuerdo de alto el fuego. Por su parte, Israel intensificó sus ofensivas contra Siria, dinamitando la esperanza en el final de la crisis en el país. Del mismo modo, la guerra que lleva años empobreciendo a Yemen tampoco muestra síntomas de terminar, y los enfrentamientos entre las tropas gubernamentales respaldadas por los países árabes y los rebeldes musulmanes hutíes siguen produciéndose. Lo más preocupante es que las hostilidades aumentaron a finales de 2021 y a principios de 2022. El 11 de enero pasado, la coalición liderada por Arabia Saudí lanzó una ofensiva militar a gran escala contra los hutíes.
Mientras, las negociaciones sobre el acuerdo nuclear de Irán (también conocido como el Plan de Acción Integral Conjunto o PAIC por sus siglas en español, firmado en 2015 entre Irán y seis grandes potencias), aún no ha cumplido con los objetivos más importantes, aunque las conversaciones se retomaron en Viena, capital de Austria a partir de abril de 2021. Las diferencias entre Estados Unidos e Irán continúan siendo el mayor obstáculo para un definitivo acuerdo bilateral. En Irak, la inseguridad también está siendo un gran desafío para la reconstrucción. En 2021, el autoproclamado Estado Islámico (EI) atentó continua y letalmente contra las fuerzas de seguridad, objetivos extranjeros y agencias gubernamentales iraquíes. Entre tanto, la arena política iraquí experimentaba altibajos, especialmente después de las controvertidas elecciones generales de octubre.
La rueda de negociaciones para revivir el acuerdo nuclear de Irán, el 27 de diciembre de 2021 en Austria. (Foto: AFP/VNA) |
Esfuerzos y esperanzas
Según los analistas regionales e internacionales, la ausencia de progreso en los puntos candentes en Oriente Medio durante el último año se debe a muchos factores. En primer lugar, los problemas son endémicos y están estancados. Encontrar consenso en mitad del odio es cada vez más difícil. Además, los recursos internacionales para resolver los problemas regionales se han reducido significativamente por culpa de la pandemia. Al mismo tiempo, algunas potencias influyentes están concentrando sus recursos en otros frentes estratégicos para sus intereses.
Sin embargo, en 2021 la comunidad internacional ha seguido esforzándose en solucionar los problemas. Así, el Consejo de Seguridad de la ONU y las principales potencias celebraron muchas reuniones en las que se mantuvo el espíritu de diálogo, reconciliación y no violencia para estabilizar el conflicto palestino-israelí. De igual forma, la ONU, la Unión Europea, las principales potencias y países relacionados celebraron ocho rondas de diálogo consecutivas a lo largo de 8 meses de negociación nuclear con Irán. Israel, Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Marruecos, también implementaron los acuerdos de paz firmados en 2020 para sentar las bases de la reconciliación en la región.
Por lo tanto, a pesar de que la situación de Oriente Medio en 2021 llegó a ser crítica, sigue habiendo esperanza en que la comunidad internacional y las partes involucradas continúen mejorando el futuro de la región.