(VOVworld) – Altos dirigentes de Ucrania, Rusia y la Unión Europea se reunirán este martes en Minsk, capital de Bielorrusia, para tratar sobre la seguridad nuclear y el conflicto en el este ucraniano. Sin embargo, los sucesos previos a esta reunión demuestran que las partes con influencia a la situación en Ucrania mantienen aún criterios encontrados en cuanto a las medidas para aplacar la tensión en ese país de Europa Oriental, lo cual motiva dudas sobre los resultados.
El encuentro de alto nivel entre Rusia, Ucrania y la Unión Europea se efectúa en medio de relaciones cada vez más delicadas entre Moscú y Kiev. Ucrania acusó a Rusia de abrir un nuevo frente en el este del territorio ucraniano, mientras Moscú anunció la preparación del segundo convoy con ayuda humanitaria a los pobladores de la región sur oriental.
Criterios opuestos
En una entrevista concedida el 24 de agosto al canal televisivo ARD de Alemania, la canciller Angela Merkel manifestó que no ponía muchas expectativas en los resultados de la reunión. Según la gobernante, el conflicto en Ucrania solo se resolverá mediante una solución política, y tanto la Unión Europea como Alemania abogan por tomar parte en este proceso. Merkel descartó una vez más la vía militar, aclarando que el bloque europeo propugna un camino que no perjudique a Rusia y el establecimiento de las buenas relaciones con Moscú.
Angela Merkel y Petro Poroshenko en la celebración del Día de la Independencia
de Ucrania, el pasado 23 de agosto
Por su parte, el ministro francés de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius opinó que Ucrania debe mantener buenos lazos con Rusia y la Unión Europea, y que París se esforzará para contribuir a resolver el conflicto y disminuir la tensión, aunque resulta difícil alcanzar la meta.
La alta representante de la Unión Europea para la Política exterior y Seguridad, Catherine Ashton, consideró el encuentro como una buena ocasión para allanar la crisis en Ucrania. También coincidió en que Kiev debe fortalecer los vínculos con Moscú y Bruselas.
Mientras tanto, la vocera del Departamento norteamericano de Estado, Marie Harf, afirmó que Estados Unidos presionará más a Rusia por las últimas informaciones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), sobre el presunto envío de armas y fuerzas para actividades militares en el territorio de Ucrania, lo que rechazó el Ministerio de Defensa de Rusia.
El ejército de Ucrania dispara proyectiles a Donetsk, un enclave de
las milicias federalistas en el este
En Ucrania, el presidente del Parlamento, Alexander Turchinov, anunció en televisión que era imposible resolver el conflicto solo a través de la vía diplomática en las provincias sur orientales entre las fuerzas federalistas y el gobierno de Kiev.
Crecientes acciones que profundizan diferendos
Ante el umbral del encuentro tripartito, el ministro ruso de Exteriores, Sergei Lavrov, destacó que Moscú apoya todos los esfuerzos para garantizar la integridad territorial de Ucrania, y está dispuesto a trabajar en cualquier marco para que los ucranianos logren un consenso interno y vivan en un Estado donde todas las etnias, culturas y religiones que lo forman sean respetadas. A la vez anunció que Moscú planea enviar otro convoy con asistencia humanitaria al este ucraniano, lo que por el contrario Kiev desalienta.
Tanques de la autodefensa ucraniana en una calle en la región suroriental
Entre tanto, el portavoz de la Comisión de Seguridad y Defensa de Ucrania, Andriy Lysenko, denunció que 10 tanques y carros blindados rusos, camuflados como federalistas, avanzan hacia el este ucraniano, en pos de preparar otro frente en el sur de Donetsk. Recientemente, el presidente Petro Poroshenko, informó que Ucrania destinará desde el 2015 hasta el 2017 unos 3 mil millones de dólares a dotar al Ejército de más aviones, helicópteros y buques de guerra. Según el mandatario, este monto es el primer paso del programa nacional de rearmar el Ejército. El pasado 24 de agosto, en la conmemoración de los 23 años de su separación de la otrora Unión Soviética, Kiev llevó a cabo un gran desfile militar, movilizando numerosos vehículos bélicos y unos mil 500 soldados.
Los existentes desacuerdos entre las partes y el creciente escepticismo mutuo, hacen más difícil el hallazgo de una solución pacífica a la crisis en Ucrania y más bien se vaticinan resultados pocos significativos en el encuentro tripartito de este martes.