(VOVworld) – El presidente de la Asamblea Nacional de Sri Lanka, Chamal Rajapaksa comenzó este lunes una visita oficial de 6 días a Vietnam por invitación de su homólogo, Nguyen Sinh Hung. Tiene como finalidad impulsar las relaciones parlamentarias bilaterales y al mismo tiempo abrir otras oportunidades de colaboración recíproca en diferentes sectores.
Las relaciones entre Vietnam y Sri Lanka tienen características especiales. Poca gente sabe que el presidente de Vietnam, Ho Chi Minh pisó el país del Océano Índico en los años 1911, 1928 y 1946. Hoy día, en Colombo su capital existe todavía el Hotel New Colonial que alojó a Ho Chi Minh en su camino hacia la independencia nacional. Además, los líderes actuales de Sri Lanka salieron a las calles para protestar la guerra de Vietnam y de ahí nació en 1966 la Asociación de Solidaridad entre ambos países. Hasta la fecha, esta organización sigue realizando debidamente actividades que contribuyen a la consolidación de los lazos bilaterales de amistad para crear una base sólida en beneficio de los nexos mutuos durante los últimos años.
El presidente del Parlamento de Sri Lanka, Chamal Rajapaksa (i) y
su homólogo de Vietnam, Nguyen Sinh Hung
La apertura de la embajada de Vietnam en la capital de Colombo en abril de 2011 y la anterior visita de Estado de su presidente Truong Tan Sang a Sri Lanka en octubre de 2010, se destacan como dos actos que han elevado las relaciones bilaterales a un nuevo nivel. Los nexos entre las dos naciones se han profundizado en los campos político, económico, cultural y educativo a lo que se suma su cooperación estrecha en el Movimiento de Países no Alineados, al igual que en otros foros internacionales. Como miembro fundador de la Convención de las Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar, Sri Lanka apoya siempre el cumplimiento de las regulaciones de seguridad y libre navegación marítima, la solución de los problemas en los mares por vías pacíficas y sobre la base de las leyes internacionales, además de respaldar la candidatura de Hanoi al Consejo de Derechos Humanos de la ONU entre 2014 y 2016.
Representantes de la delegación de Sri Lanka entregaron recuerdos
a la Unión de Organizaciones de Amistad de Vietnam
Sin embargo, los lazos entre los dos países permanecieron por debajo de sus potencialidades debido a los conflictos políticos por los que atravesó Sri Lanka durante 30 años hasta mayo de 2009. Con la llegada de la paz a la antigua Ceilán se abren numerosas oportunidades de desarrollo económico. Dos años después de la guerra allí, la economía nacional ha crecido a un ritmo superior al 8% con un Producto Interno Bruto de 59 mil millones de dólares. Además, con una población de 20 millones de personas y un ingreso per cápita de cerca de 3 mil dólares al año, se puede calificar de “elevado” el poder adquisitivo en el mercado interno. Por su parte, Vietnam puede aprovechar el Acuerdo de Libre Comercio firmado entre Sri Lanka, India y Pakistán para comerciar sus productos en el mercado de Asia del Sur donde viven unos mil 500 millones de habitantes y cuya tercera parte disfruta de ingresos medios. La isla llamada antes Ceilán aboga por atraer inversiones vietnamitas en los sectores de petróleo, telecomunicación, fabricación de maquinaria y productos acuáticos y ampliar sus negocios en el país indochino y de ahí entrar en el mercado del sudeste asiático. Desde 2010 hasta la fecha, Sri Lanka ha enviado dos delegaciones empresariales a Vietnam para investigar las potencialidades comerciales. Después de estas visitas, ambas partes han firmado acuerdos en los ámbitos de industria farmacéutica, sanidad, manufacturación de té e infusión, producción de máquinas agrícolas y tecnología informática con el objetivo de elevar el intercambio comercial a mil millones de dólares para los próximos años. Con una serie de documentos de cooperación firmados como los acuerdos de estimulación y protección inversionista, contra la criminalidad, de cultura, agricultura, productos acuáticos y educación en el período 2011–2015, Vietnam y Sri Lanka cuentan con numerosas potencialidades de cooperación para la prosperidad de ambos pueblos.
Las relaciones políticas de amistad tradicional entre Vietnam y una isla del Océano Índico pacífica, estable y emergente tras la guerra constituyen buenas condiciones para incentivar el desarrollo de esos vínculos. Por eso, la visita del presidente del Parlamento de Sri Lanka a Vietnam puede que resulte otra gran oportunidad para cultivar los nexos bilaterales entre Hanoi y Colombo.