(VOVworld) – Los altos funcionarios diplomáticos de la Unión Europea (UE) acordaron prolongar por 6 meses las sanciones impuestas a Rusia debido a los conflictos en el este de Ucrania. Aunque esta resolución tiene que esperar la aprobación en la reunión del bloque regional a celebrarse en los próximos días, las diferencias sobre el tema en el seno de la UE cada vez son más evidentes.
Los embajadores de los 28 países miembros de la Unión Europea convinieron este 21 de junio en prolongar las sanciones contra Rusia hasta el 31 de enero de 2017, argumentando que no se vislumbra ningún progreso en la solución de los enfrentamientos en Ucrania.
Esa decisión se tomó después de que Moscú celebrara del 16 al 18 del corriente mes el Foro Económico Internacional en la ciudad de San Petersburgo. En esta cita, calificada de versión pequeña del Foro de Davos, el presidente ruso, Vladimir Putin, hizo declaraciones reconciliadoras y reafirmó la disposición de Kremlin de levantar las medidas de represalia contra la Unión Europea si la última no aprueba la mencionada resolución.
Evidentes discrepancias internas
Diplomáticos de la Unión Europea se reúnen en Luxemburgo el 20 de junio de 2016 (Foto: Washington Post)
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La extensión del plazo de las sanciones impuestas a Moscú se acordó en un contexto en el que cada vez más estados del bloque regional abogan por un mejoramiento de las relaciones con Rusia. Incluso, un número creciente de políticos europeos apoyan la reanudación de los nexos con el Kremlin después de un largo tiempo de tensiones debido a las contiendas asociadas a la crisis ucraniana. Italia, Grecia y Hungría cuestionan si es necesario prolongar el castigo contra Rusia. El primer ministro italiano, Matteo Renzi, exhortó a debatir sobre la eficiencia del embargo económico antes de aprobar dicha propuesta. Mientras, el secretario del Partido italiano Liga Norte y diputado parlamentario, Paolo Grimaldi consideró que las mencionadas medidas han provocado una pérdida de 3 mil 700 millones de euros a la economía de su país al no poder exportar productos al mercado ruso. Por otro lado, el ministro de Relaciones Exteriores de Alemania, Walter Steinmeier, propuso que la Unión Europea levante de forma gradual las sanciones impuestas a Moscú. En tanto, el Parlamento de Francia hizo lo mismo, reconociendo la ineficiencia de las medidas punitivas que han perjudicado considerablemente la economía nacional.
Además, el canciller de Eslovaquia, Miroslav Laychek confirmó la demanda creciente de debates políticos que respaldan el levantamiento del embargo económico contra el país euroasiático. Por su parte, Nadezhda Savchenko, miembro de la delegación de Ucrania en la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, apoyó ese criterio, sugiriendo la derogación gradual del castigo.
Según analistas, el aumento de la cifra de países del bloque europeo a favor de la revocación del embargo impuesto a Rusia se debe no sólo a las pérdidas económicas, sino también a la crisis migratoria.
Sin embargo, en las naciones balcánicas y Polonia, el criterio contrario es contundente. Compartiendo esta postura, el canciller del Reino Unido, Philip Hammond, rechazó una negociación sobre el tema hasta que se recupere la paz en el este de Ucrania.
En la actualidad, existen en el seno del viejo continente discrepancias profundas en cuanto al asunto de Rusia. El jefe de la diplomacia alemana, reconoció una mayor dificultad para extender el plazo de las sanciones contra el Kremlin en comparación con el año pasado. Mientras el periódico Le Monde de Francia evaluó que la acción de la Unión Europea no se debe a su voluntad, sino porque no es hora de revocar las sanciones y lo importante es guardar las apariencias del bloque regional en torno a su solidaridad comunitaria.
Pérdidas recíprocas
El presidente de Rusia, Vladimir Putin en la reunión con representantes de distintos medios de comunicación internacionales en el Foro Económico Internacional en la ciudad de San Petersburgo (Foto: PA)
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La Unión Europea comenzó a aplicar las medidas punitivas impuestas a Moscú en julio de 2015. Hasta septiembre del mismo año, reforzó el embargo contra sus bancos y corporaciones de petróleo y armas. De momento, este bloque regional es el mayor socio en importancia de Rusia al representar el 45% del volumen comercial de ese país euroasiático. Mientras, este último es el cuarto socio comercial de la Unión Europea, seguido por Estados Unidos, China y Suiza, además de ser uno de los proveedores principales de gas y petróleo del viejo continente. Sin embargo, el intercambio comercial entre Moscú y el bloque comunitario alcanzó sólo 230 mil millones de dólares en 2015 frente a 420 mil millones registrados en 2013 como consecuencia de las citadas medidas de castigo.
Cabe la posibilidad de que se ratifique la extensión del plazo de las sanciones contra el Kremlin este 24 de junio o en la reunión de los líderes de la Unión Europea, a celebrarse del 28 al 29 del corriente mes en Bruselas, Bélgica. De esta manera, está claro que la resolución se aprobará. Sin embargo, lo que vislumbra el grupo de los 28 no es más que una división interna cada vez más grave después de 2 años de aplicación de las sanciones contra Moscú. En idéntico sentido, la Unión Europea no sólo sufre pérdidas económicas emanadas de su propia política, sino también debe concentrarse en mantener la solidaridad del bloque frente a Rusia.