(VOVworld) - La masacre que provocó a finales de la semana pasada más de 100 muertos en Hula, aldea cerca de la ciudad de Homs, en el centro de Siria parece hacer baldíos los esfuerzos de la comunidad internacional para resolver la crisis política en esa nación del Oriente Medio. Este es uno de los peores incidentes desde la explosión de la rebelión contra el gobierno en Siria hace un año, lo que evidencia malas perspectivas para la paz en ese país islámico y demuestra lo espinoso de la tarea.
Los conflictos en Siria han cobrado la vida de muchos civiles
La matanza de Hula provocó un tremendo shock en la comunidad internacional por su elevado saldo de bajas, un tercio de ellas de niños inocentes. En su primera reacción, el Consejo de Seguridad de la ONU emitió una declaración en la cual condenó de modo categórico estos atentados, considerándolos una grave violación del acuerdo de cese de fuego entre el Gobierno de Damasco y la oposición. Este organismo mundial también exhortó a la administración siria a retirar de inmediato las armas pesadas y sus tropas de las ciudades más pobladas. Mientras tanto, el enviado especial de las Naciones Unidas y la Liga Árabe, Kofi Annan arribó este lunes a Damasco, para reclamar a las partes litigantes actuar en favor de un proceso político viable, enfatizando que este mensaje de paz es para todas las facciones en Siria.
Numerosos países también urgieron a poner fin a 14 meses de motines que cobraron la vida de más de 12 mil 600 sirios. El canciller ruso Sergei Lavrov indicó que Moscú se siente descontento por el proceso y los resultados del despliegue del plan de paz planteado por Kofi Annan. Rusia muestra preocupaciones ante la repetición de los masacres de civiles como lo ocurrido recientemente en la aldea de Hula y no descarta la injerencia de fuerzas instigadoras. Por otro lado, en una conversación telefónica sostenida este 28 de mayo, el presidente francés, Francois Hollande y el primer ministro británico David Cameron acordaron tomar medidas para aumentar las presiones internacionales al gobierno de Bashar al Assad y organizar un encuentro entre “los amigos de Siria” en Francia en una fecha cercana.
En este contexto, el vocero de la Cancillería siria, Jihad Makdissi anunció que el gobierno de Damasco se ha convertido en blanco de pérfidas acusaciones. Y como respuesta a esta declaración, la oposición en Siria llamó a una urgente intervención de la ONU para poner término a las represiones del gobierno.
Según analistas, cualquier que haya sido la fuerza que instigó la masacre en Hula, ello evidencia que los conflictos se siguen agudizando en esta nación arabe y demuestra el mal guión de Kofi Annan con su plan de paz de 6 puntos. Este incidente desvela la verdad de que los compromisos de alto al fuego nunca fueron cumplidos ni respetados en Siria, incluso la violencia continúa escalando. El más reciente informe del Secretario General de la ONU, Ban Ki Moon, reconoció que los esfuerzos de la máxima organización mundial sólo alcanzaron insignificantes avances y que se nota una destrucción material considerable en todo el territorio sirio. Los observadores que habían sospechado de la viabilidad de los planes de paz de Kofi Annan, ahora creen en la veracidad de su razonamiento.
El problema clave en la búsqueda de una solución a la crisis política en Siria radica en que la confianza entre las facciones nunca ha sido restaurada. Mientras el gobierno del presidente Bashar al Assad se comprometió a cumplir las directrices del plan de paz del enviado especial de la ONU y la Liga Árabe, al contrario las facciones opositoras en este país prosiguen sus ataques para conseguir el control de las zonas importantes de varias ciudades. Además, según revelaciones de funcionarios diplomáticos de EEUU, las armas que proceden del exterior aumentan cada vez más en Siria. Las fuerzas antigubernamentales comenzaron a recibir una mayor cantidad de armas más modernas. En esta coyuntura, no es difícil presagiar el ineludible riesgo de enfrentamiento militar entre el Ejército y los rebeldes. Esto significa que la solución pacífica para Siria sigue siendo un problema sin remedio./.