(VOVworld) – Con 229 votos a favor, 64 en contra y 6 abstenciones, el Parlamento de Grecia aprobó el 16 de julio el plan de ajuste exigido por los acreedores internacionales para recibir un paquete de asistencia de 86 mil millones de euros (unos 94 mil millones de dólares). Entretanto, los demás estados de la eurozona consideran un tercer paquete de ayuda financiera para el país heleno. De esta manera, Atenas ha salido temporalmente de la situación crítica para mantener su membresía en la unión monetaria. Sin embargo, se duda si la economía griega progresará en lo adelante. 

La propuesta ha sido aprobada después de las reñidas  discusiones en el Parlamento. El Partido Syriza en el poder logró aprobar este plan gracias al consenso alcanzado con la oposición pro Europa. Sin embargo, 38 legisladores del Partido Syriza emitieron votos en contra y abstenciones, entre ellos, dirigentes del Gabinete. Esto demuestra la división en el gobernante partido en cuanto a la implementación de las medidas de austeridad rechazadas categóricamente en el último referendo al respecto. No obstante, en el actual momento, resulta difícil para que los diputados griegos digan “No” a dicho acuerdo firmado el 13 de julio con la eurozona.    

Obstáculos en el plan de rescate financiero

Según el pacto, se requiere del Consejo de los Helenos reformas profundas con un aumento del Impuesto sobre el Valor Añadido, y de impuestos a sociedades y artículos de lujo, entre otros para beneficiarse de un apoyo financiero de 82 a 86 mil millones de euros dentro de tres años. Sin embargo, este plan tiene que ser aprobado por 8 países integrantes de la eurozona, y para ello, se prevé llevar meses. Hasta la fecha, se registra sólo la aprobación del Parlamento francés acerca del tema. Se trata de una tarea espinosa porque políticos de numerosos países involucrados no han logrado un alto consenso sobre la ayuda financiera para Atenas.

Las dificultades se agravan incluso en el seno de Grecia con la división profunda en el poder legislativo en medio de un número creciente de opiniones contra el rescate considerándolo como un acuerdo pésimo para mantener su “colonia de deuda”. Esto tiene como señal el comienzo de una nueva fase de inestabilidad política en el país heleno. Además de las reformas exigidas, Grecia debe buscar medidas de crecimiento, un verdadero desafío. Cómo salir de una recesión crítica ha sido una cuestión sin respuesta para los dirigentes griegos. El recorte de gastos públicos no garantiza un crecimiento apropiado para saldar las crecientes deudas soberanas e incluso provocaría efectos contraproducentes.

Soluciones “desnudar a un santo para vestir a otro”

Según especialistas, aunque se ha logrado salvar a Grecia de la bancarrota a última hora, esto no alivia la preocupación por su posibilidad de quiebra en el futuro. Se cuestiona hasta cuándo la tercera ayuda financiera puede rescatar a Atenas? El primer paquete de asistencia se aprobó en mayo de 2010 para solucionar las dificultades a corto plazo mientras que el segundo, acordado en febrero de 2012 regresó por la senda recorrida. En cuanto al tercer paquete, no se puede asegurar la capacidad de liquidación de deudas por parte de Grecia en los tiempos venideros, por lo que se describe de una solución temporal para impedir el naufragio del barco heleno.  

En un documento investigativo sobre la situación de Atenas publicado el 14 de julio, el Fondo Monetario Internacional estimó que la carga de deudas griegas se multiplicará considerablemente en los próximos 10 años respecto a lo previsto y hasta 2016, equivaldrá al 200% del Producto Interno Bruto, un aumento del 20% en comparación con lo planeado, debido en parte a la recesión continua en el año en curso. En 2022, se prevé que esta cifra alcanzará un 170% del Producto Interno Bruto frente al nivel trazado del 142%. De esta manera, Grecia necesita más que la ayuda financiera de 86 mil millones de euros recién recibida para mantener la estabilidad económica.

Futuro imprevisible

Desde que estallara la crisis en 2010, los sucesivos gobiernos de Grecia han tenido que cumplir las exigencias de la troika compuesta por la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional. Sin embargo, Atenas se ha sumergido cada vez más en la recesión económica. Hasta la fecha, la tasa de parado de Grecia alcanzó el 26,5%, la más alta de la Europa. Esta cifra ascendió incluso al 60% en el sector joven. Estas son las consecuencias derivadas del recorte salarial en el sector público y el aumento fiscal durante el período de recesión. De esta manera, las medidas de austeridad adoptadas con mayores exigencias para recibir el tercer paquete de rescate agrava la situación económica del país heleno, a corto plazo, provocando el desorden social. Entretanto, la población pierde lentamente su paciencia en cuanto a las políticas del gobierno. Ejemplo es la protesta del 15 del corriente mes con la participación de miles de personas para impugnar la política de austeridad. La manifestación culminó con decenas de bombas incendiarias lanzadas contra policías fuera de la sede del Consejo de los Helenos. Se trata de una de las oleadas de violencia más críticas durante los últimos 2 años en Grecia. Es seguro que en los próximos días, la situación en este país siguirá siendo volátil.