(VOVworld) – Con 236 votos a favor y 189 en contra, la Cámara de Representantes de Estados Unidos prorrogó hasta el 30 de julio la segunda votación del proyecto de Asistencia de Ajuste Comercial, parte de la propuesta denominada Autoridad de Promoción Comercial, o Vía Rápida, que de convertirse en ley, abrirá las puertas al Acuerdo de Asociación Transpacífica (TPP), promovido por Washington. Se desconoce todavía el desenlace de este proyecto, pero seguramente su desaprobación en esta votación prolongará más las negociaciones para el TPP, y al mismo tiempo desvela una profunda división interna del gobernante Partido Demócrata.

Con esta prórroga, el presidente Barack Obama y los partidarios de la Autoridad de Promoción Comercial tendrán más tiempo de buscar vías para salvar esta propuesta. Sin embargo, según estimaciones, tendrán muy poca posibilidad de lograr su aprobación y concretarse el proyectado Acuerdo de Asociación Transpacífica, dado que en la anterior votación, la propuesta chocó con una protesta enérgica demostrada en 302 votos en contra sobre 126 a favor. Irónicamente, lo rechazaron congresistas de la misma ala demócrata del presidente Barack Obama.

Destino de la Autoridad de Promoción Comercial

La Autoridad de Promoción Comercial es una medida de apoyo a los trabajadores estadounidenses que pueden perder empleos por la formación de la Asociación Económica Transpacífica. Hasta el momento, se van finalizando las negociaciones, pero los socios comerciales de Estados Unidos piden la aprobación de esta propuesta antes de completar el proceso negociador. Un sí a la disposición significaría que el Congreso norteamericano solo podría votar a favor o en contra, sin posibilidad de aplicar enmiendas a convenios internacionales de comercio. El proyecto es considerado como una condición indispensable para que Barack Obama tenga la autoridad de llevar a cabo las negociaciones sobre el TPP con Australia, Brunei, Canadá, Chile, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam, en aras de formar una zona de libre comercio que representa el 30 por ciento del intercambio comercial y el 40 por ciento del Producto Interno Bruto del mundo.

No obstante, a pesar de los esfuerzos de Obama, la Asistencia de Ajuste Comercial, parte de la medida que facultaría al Ejecutivo a negociar pactos con otros países o grupos de naciones, fue desaprobada en la votación del pasado 12 de junio en la Cámara Baja. Mientras que casi todos los conservadores manifestaron su respaldo, la mayoría de los demócratas se preocuparon de que el proyectado Acuerdo de Asociación Transpacífica solo beneficie a las compañías transnacionales y conduzca al desempleo de trabajadores nacionales, frente al interés en la mano de obra barata en el exterior. Por otro lado, la propuesta de Obama de recortar 700 millones de dólares del seguro sanitario por valor de 2 mil 600 millones de dólares a las personas de mayor edad, para el programa de Asistencia de Ajuste Comercial, chocó con una fuerte crítica de los demócratas. La líder de la minoría en el Congreso, Nancy Pelosi, declaró sin términos equívocos que votará en contra de la propuesta para poner coto a la Vía Rápida. En su misiva enviada a los congresistas después de la votación, Pelosi instó a los legisladores republicanos y demócratas a coordinar en la redacción de un nuevo proyecto de ley pertinente, con regulaciones más categóricas, para proteger los derechos de los trabajadores estadounidenses y el medio ambiente.

Derechos de los trabajadores: tema esencial

Así pues, se debe esperar hasta el próximo 30 de julio para saber del destino de la medida. Le espera al presidente Barack Obama una dura pugna por delante. El último suceso predice grandes dificultades para el jefe de la Casa Blanca antes del término de su segundo mandato dentro de 18 meses. Este resultado demuestra además la división interna del Partido Demócrata. La posición de los demócratas de proteger a los trabajadores, se debió a sus relaciones estrechas con las organizaciones sindicales. No quieren perder la oportunidad de ser reelegidos en el próximo mandato. La protesta categórica de los sindicatos representará una amenaza a la posible reelección de cualquier demócrata que respalde la proyectada Asociación Transpacífica.

Según analistas, el rechazo a la Autoridad de Promoción Comercial obstaculizará el camino hacia el Acuerdo Transpacífico, que se  retrasa varios años de lo programado. Esta medida reviste un significado sumamente importante para las conversaciones sobre el susodicho acuerdo, de por sí complicadas y difíciles de llegar a un consenso entre los 12 países negociadores. A finales de mayo pasado, se planeó celebrar la última ronda  ministerial sobre este tratado pero a última hora, la reunión fue cancelada porque Japón y Chile anunciaron la imposibilidad de finalizar las negociaciones sin la aprobación bipartidista del proyecto de Autoridad de Promoción Comercial.

Dificultades previsibles del Acuerdo Transpacífico antes de su alcance

Sin embargo, la desaprobación de la Asistencia de Ajuste Comercial no es el desenlace final de la Autoridad de Promoción Comercial, pues hasta el 30 de julio, el presidente Obama hará todo lo posible para convencer a los demócratas. Pese a la ilusión sobre una herencia económica de Obama, puede que las negociaciones del Acuerdo Transpacífico duren más tiempo. En el contexto del ascenso de China, Washington deberá encontrar una voz común para alcanzar tan importante acuerdo comercial.