El primer ministro Pham Minh Chinh revisa la labor de prevención y control del covid-19 en el Internado de la Universidad Nacional de Ciudad Ho Chi Minh.(Ảnh: VOV)

Desde hace más de un año, la humanidad ha debido convivir con el coronavirus. Es así que, hasta el 15 de julio de 2021, se contabilizaron más de 188 millones de casos de infección con el covid-19, y entre ellos, más de cuatro millones de decesos. Como es bien sabido, esta pandemia ha detenido el desarrollo socioeconómico de casi todas las naciones. 

Es por ello que, al igual que otros países, Vietnam se ha empeñado en contener la propagación del virus. Sin embargo, algunas organizaciones reaccionarias en exilio como lo son Viet Tan y Gobierno Provisional de Vietnam, así como las emisoras La Voz de América (VOA), Radio Libre de Asia (RFA) y Nuevo Horizonte, han publicado cientos de artículos en detrimento del prestigio de Vietnam en las redes sociales, con argumentos tergiversadores respecto a la situación y a la respuesta al covid-19 en esta nación. 

El personal de la salud no escatima esfuerzos, trabajando día y noche para contener el virus. (Ảnh: VOV)

Por su parte, desde que se descubrió el primer caso de contagio del virus SARS-CoV-2 en el país en febrero de 2020 hasta la fecha, con una actitud proactiva y siguiendo el lema de “Todo por la salud de la población”, el Gobierno vietnamita siempre se ha mostrado dispuesto a sacrificar los intereses económicos a cambio de la salud y la vida de su pueblo.

Esta es una posición unánime del poder ejecutivo en la prevención y el control del covid-19. Por ello se creó rápidamente el Comité Directivo Nacional, y se movilizó a la población para que se uniera a la lucha contra la enfermedad con un espíritu de guerra. Vietnam también adoptó medidas y estrategias drásticas desde el nivel central hasta el local, como la zonificación y el rastreo en ámbitos adecuados, el control de las áreas aisladas, la puesta en cuarentena de los contactos cercanos, el tratamiento de los pacientes, la investigación, el desarrollo y la producción de vacunas, así como la compra de estos fármacos y la inmunización colectiva. 

Numerosos trabajadores en Ciudad Ho Chi Minh han sido vacunados.(Ảnh: VOV)

La evolución complicada de la cuarta ola epidémica desde finales del mes de abril hace que se recrudezca el trabajo de prevención y control del covid-19 en Vietnam, sobre todo en las localidades más afectadas. Una vez más, la solidaridad y la responsabilidad de cada persona en esta batalla coadyuvan la respuesta a la epidemia. 

Hasta el momento, la situación epidemiológica en las provincias de Bac Ninh, Bac Giang y algunas otras provincias y ciudades se ha estabilizado. En Ciudad Ho Chi Minh, a pesar de la rápida propagación, el gobierno local y el sistema político de todo el país -junto con las organizaciones sociales, empresas y el pueblo- toman con celeridad iniciativas y acciones drásticas para contener el letal virus, retornar a la nueva normalidad la situación en la mayor urbe sureña y apoyar a las personas más vulnerables, con un gran espíritu luchador y de solidaridad. 

Por otra parte, Vietnam es también un país pionero en la movilización de recursos para la adquisición y recepción de vacunas anticovid-19, para avanzar hacia la inmunización colectiva. La conclusión número 07 del Buró Político sobre las tareas centrales para agilizar la respuesta a la pandemia y el desarrollo socioeconómico, promulgada el 11 de junio de 2021, señala: 

“Es menester acelerar la compra de vacunas y organizar bien la vacunación de las personas, priorizando a las que se encuentran a primera línea del combate anticovid-19, las áreas de alto riesgo y trabajadores de producción directa en las zonas industriales, además de considerar la inoculación a los niños. Hay que confeccionar y publicar programas y planes de vacunación para lograr pronto la inmunidad colectiva”

Al echar una mirada retrospectiva a más de un año del despliegue del programa de prevención y lucha contra la pandemia de covid-19 en Vietnam, se puede decir que la clave para lograr la eficiencia en la respuesta a la enfermedad es el liderazgo firme del Partido Comunista, la orientación oportuna y categórica del Ejecutivo y la administración desde los distintos niveles, así como el consenso y la solidaridad de toda la ciudadanía. 

En particular, esto se ve reflejado en el Fondo Nacional de Vacunación contra el Covid-19, el cual, a pesar de su reciente creación, ha recibido ya cientos de millones de dólares aportados por numerosos organismos, organizaciones, empresas y particulares, tanto en el país como del exterior.