(VOVWORLD) - La decisión de China de establecer los distritos de Xisha y Nansha (pertenecientes a la ciudad de Sansha) con la intención de administrar los archipiélagos de Hoang Sa (Paracels) y Truong Sa (Spratly) violan los derechos soberanos de Vietnam, el cual tiene suficientes bases legales y evidencias históricas para ratificar su soberanía indiscutible sobre estos territorios.
Dai Nam Nhat Thong Toan Do (Mapa completa de Dai Nam unificado) de 1834 y un plano del Occidente de 1749 afirman la soberanía indiscutible de Vietnam sobre los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa. |
Según el Ministerio de Asuntos Civiles de China, sede de esas unidades administrativas se ubicarán en la isla de Phu Lam, o Woody Island en inglés, y el arrecife Chu Thap, o Fiery Cross Reef. Dicha decisión no tiene ningún valor porque los islotes antes mencionados pertenecen a los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa de Vietnam.
Evidencias históricas y administración legítima
Vietnam ha tenido un reclamo de larga data por la soberanía de los archipiélagos Hoang Sa y Truong Sa, que es totalmente coherente con el derecho internacional sobre el establecimiento y la afirmación de la soberanía territorial. Las evidencias de este hecho se describen en libros y documentos antiguos del país, así como de China en la época feudal y de algunos países de Europa, como Francia, Portugal y España.
Muchos textos preservados hasta ahora afirman la soberanía de Vietnam sobre las islas de Hoang Sa y Truong Sa. De ellos, destacan los mapas del siglo XVII que las llamaron Bai Cat Vang (Arena Dorada) y hacían notar que pertenecían al distrito de Binh Son, en la provincia de Quang Ngai en el centro del país. También, se encuentran más testmonios en libros, documentos administrativos y anales de la dinastía Nguyen como “Phu Bien Chi Luc”, una geografía escrita por el erudito y enciclopedista vietnamita Le Quy Don que detalla los territorios de la dinastía Nguyen en las provincias de Thuan Hoa y Quang Nam, así como “Dai Nam Thuc Luc” (Crónicas de Dai Nam- otro nombre antiguo de Vietnam, de 1844 a 1848) y “Dai Nam Nhat Thong Chi” (Atlas de Dai Nam Unificado, 1882).
En ellos, se describe que durante su administración, la dinastía Nguyen llevó a cabo actividades concretas para reafirmar la soberanía nacional en ambos archipiélagos. Creó flotillas en los territorios insulares de Hoang Sa y Bac Hai para explotar recursos marítimos y realizar trabajos topográficos y cartográficos, además de edificar estelas y colocar hitos fronterizos en 1816, 1834, 1835 y 1836. De hecho, después de 1884, el gobierno francés en Indochina siguió consolidando la soberanía sobre los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa.
No pueden reclamar la soberanía con la fuerza
Tales testimonios evidencian la soberanía indiscutible de Vietnam sobre estos territorios. Además, desde la perspectiva de la ley internacional, China viola gravemente la Carta de las Naciones Unidas al ocupar ilegalmente Hoang Sa a partir de 1974, cuando lo invadió. Su acción no puede ayudarle a reclamar lo que no le pertenece. El ex vicepresidente del Comité Nacional de Fronteras de Vietnam, Tran Duy Hai, dijo: “Antes de retirarse de Vietnam, Francia traspasó a la nación la gestión del archipiélago de Hoang Sa. Sin embargo, China atacó la guarnición de la entonces República de Vietnam en ese territorio para usurparlo. Esta es la verdad. El uso de la fuerza para invadir Hoang Sa definitivamente no es una acción legítima que ampare la reclamación por parte de China de estos territorios.”
Con el deseo de contribuir a la paz y la estabilidad en la región y en consideración a la importancia de las relaciones entre los dos países, Vietnam siempre trata de solucionar las disputas por vías pacíficas y diálogos. Pero, ¿qué ha hecho China para “insistir en las negociaciones amistosas, manejar y resolver adecuadamente los problemas en el Mar Oriental, haciéndolo una zona pacífica, amigable y cooperativa”, como lo expresado en el Acuerdo de 6 puntos que firmaron Hanói y Beijing en 2011? La respuesta es obvia. El doctor y abogado Hoang Ngoc Giao, director del Instituto de Políticas, Leyes y Desarrollo de Vietnam, enfatizó: “Por un lado, China declara que respeta el derecho internacional. Por otro lado, acciona en contra de sus anuncios. Esto perjudica su prestigio y su posición en el plano internacional. Está claro que China ha perdido su imagen. La comunidad internacional necesita saber lo que ha hecho.”
El Estado de derecho y el cumplimiento de la ley internacional son los aspectos más importantes para cada nación, grande o pequeña. Como una economía clave, China debe ser más responsable y acatar las leyes internacionales, incluida la Convención de la ONU sobre el Derecho del Mar de 1982. La decisión de China de establecer los distritos de Xisha y Nansha en los archipiélagos vietnamitas de Hoang Sa y Truong Sa es contraria a los hábitos y las prácticas internacionales, lo que socava la confianza y crea muchas consecuencias peligrosas para la región y el resto del mundo.