(VOVworld) – La presidenta de Argentina, Cristina Fernández de Kirchner, inició este miércoles una visita a Rusia, en reciprocidad a la del presidente Vladimir Putin a Buenos Aires en julio de 2014. Además de estrechar la relación bilateral, para Rusia, significa reactivar su influencia en América Latina, mientras que Argentina busca un apoyo de Moscú en las disputas territoriales en las islas Malvinas que Gran Bretaña ocupa.
En una visita oficial de dos días, la mandataria argentina, Cristina Fernández de Kirchner, sostendrá conversaciones con su homólogo anfitrión, Vladimir Putin para debatir y proponer medidas para desplegar con eficacia la cooperación en diversos ámbitos potenciales, sobre todo en la energía nuclear. No obstante, observadores evaluaron que la cooperación en defensa es el foco del encuentro entre los dos líderes.
La guardia de honor militar de Rusia da la bienvenida a la presidenta argentina
Reforzar cooperación en defensa
De acuerdo con el último anuncio del Ministerio de Defensa de Rusia, los dos países acordaron planes para reforzar la cooperación militar entre sus ejércitos en el contexto cambiante del mundo. El acuerdo fue alcanzado durante una reunión entre funcionarios de Defensa de los dos países en el marco de la cuarta Conferencia de Seguridad Internacional, efectuada la semana pasada en Moscú.
Anteriormente, en la visita del jefe del Kremlin a Buenos Aires, en julio del año pasado, ambas partes abogaron por intensificar la colaboración en defensa, considerándola como una esfera clave de los lazos bilaterales en la nueva etapa. Según lo pactado, Rusia se ha comprometido a ampliar la cooperación con sus socios latinoamericanos, incluida Argentina, en la formación del personal militar. Durante esa visita, Argentina acordó un contrato de compra de 12 aviones supersónico modelo Sukhoi Su 24 de Rusia. A cambio, Argentina proporcionará a la parte rusa, trigo, productos cárnicos y otros artículos agrícolas. Por lo tanto, esta visita, además del objetivo de promover el comercio bilateral, las dos partes también firmarán un acuerdo de compraventa de equipos militares, marcando oficialmente que Argentina y Rusia se han convertido en asociación estratégica bilateral en el campo de la seguridad y la defensa.
Ambos líderes firman una serie de acuerdos de cooperación en ocasión
de la visita del presidente ruso a Argentina en julio de 2014
En bien de ambas partes
Las relaciones bilaterales carentes de conflictos se desarrollan en la dirección correcta, especialmente en el ámbito comercial. Sin embargo, estos buenos lazos todavía no se han aprovechado plenamente para reportar mayores beneficios mutuos. Adicionalmente, las sanciones económicas impuestas por Occidente a Rusia, le obligan a la ampliación de nuevos mercados en América Latina. Los contratos comerciales de productos agrícolas con los Estados latinoamericanos, entre ellos Argentina, permitirán reducir el impacto de las sanciones económicas de Estados Unidos y Europa, bajo el pretexto de la crisis de Ucrania. Al mismo tiempo, el compromiso del Kremlin con Buenos Aires para fortalecer su capacidad militar de vigilancia del espacio aéreo sobre las islas Malvinas, es la medida con que Moscú quiere " asustar" al Reino Unido, país que se puso a la vanguardia en la imposición de sanciones contra Rusia.
En cuanto a la disputa entre el Reino Unido y Argentina por la soberanía de las Malvinas después de la guerra allí en 1982 hasta ahora, el conflicto se ha mantenido. Gran Bretaña aprovecha noticias sobre la probable compra por parte de Argentina de aviones de asalto ruso Sukhoi, para justificar sus elevados presupuestos militares en esta zona en disputa.
Por eso, la visita de la estadista argentina a Rusia, centrada en la ejecución de los acuerdos de cooperación militar, provoca preocupación no solo para Reino Unido, sino también para Estados Unidos, por la creciente presencia de Rusia en América del Sur. Al mismo tiempo, también plantea nuevos desafíos para Estados Unidos y sus aliados occidentales, y alienta una posible carrera armamentista en la región.