(VOVworld) - Al contrario de los pronósticos de observadores, Irán y el Grupo P5+1 que reúne a los 5 países miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU y Alemania, lograron progresos en las negociaciones sobre el programa nuclear de Teherán, realizadas del 25 al 26 de febrero en la República de Kazakstán. Con este resultado, ambas partes se encaminan a sacar del estancamiento el contencioso.

Al terminar las negociaciones, representantes de Irán y el Grupo P5+1 señalaron logros positivos, lo que se refleja en el acuerdo de emprender otros diálogos del 17 al 18 de marzo en Turquía y del 5 al 6 de abril en Kazakstán. Además, el Grupo P5+1 concedió al proponer un alivio en las sanciones impuestas a las transacciones de oro y otros metales preciosos, en lugar de levantar el embargo de componentes de aeronaves civiles para que Irán limite el alcance de su programa nuclear. Por su parte, Teherán tendría que poner fin al enriquecimiento de uranio a nivel del 20% y cerrar la central Fordow, donde se procesa este elemento radioactivo, según Occidente.

El jefe de la delegación negociadora de Irán sobre la cuestión nuclear, Saeed Jalili opinó que las potencias occidentales se muestran cada vez más pragmáticas en su enfoque del tema nuclear que se continuará discutiendo en los proyectados diálogos para construir la confianza. El canciller de la nación persa, Ali Akbar Salehi expresó su optimismo sobre las venideras negociaciones con el Grupo P5+1, luego del encuentro en Kazakstán que consideró un viraje en beneficio común. Mientras tanto, la alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton espera gestos positivos de Irán en cuanto a las sugerencias del Grupo P5+1. De acuerdo con Ashton, las propuestas autorizadas por el Consejo de Seguridad de la ONU, se han discutido meticulosamente para ganar la confianza y fomentar las negociaciones. Países del Occidente reconocieron que el alivio de sanciones relativas a las transacciones de oro y otros metales preciosos constituye solo un progreso modesto. Sin embargo, con tal alivio, puede ayudar a Teherán a salir de las dificultades derivadas de las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea. Rusia y China coincidieron en que los diálogos fueron francos, útiles y constructivos. El secretario norteamericano de Estado, John Kerry compartió también este criterio. Afirmó al mismo tiempo la disposición de Washington de realizar negociaciones bilaterales con Teherán.

A pesar de los resultados, quedan numerosas trabas que requerirán de mayores concesiones mutuas. La condición previa de Occidente es cerrar la central Fordow. Sin embargo, el jefe de la delegación negociadora y también secretario del Consejo Supremo de Seguridad de Irán, Saeed Jalili persiste en desarrollar el programa nuclear del país con fines pacificadores y opinó que esta planta está bajo la vigilancia de la ONU, por lo cual no existe ninguna razón para cerrarla. En cuanto a la suspensión del enriquecimiento de uranio a nivel del 20%, Jalili informó que se tratará en los próximos diálogos.

Aunque sin frutos espectaculares, las negociaciones en Kazakstán hacen vislumbrar esperanzas de seguir avanzando en los diálogos por venir. Puede que se trate de una señal alentadora para sacar del estancamiento el controversial programa nuclear iraní.