(VOVWORLD) - En 2006, cuando comenzaron los trabajos de construcción de la planta hidroeléctrica de Son La, en el norte de Vietnam, los Thai Blanco, que ocupaban el área, se mudaron a la comuna de Muong Chien. A partir de entonces asentaron la aldea de He y se dedicaron principalmente a la ganadería y los cultivos. Su jefe se llama Dieu Chinh Hung y desde su nombramiento, el pueblo ha tenido una nueva fisonomía.
El centro de la comuna de Muong Chien, en el distrito de Quynh Nhai, provincia de Son La (Foto: baosonla.org.vn) |
En una hectárea en la colina que le asignaron las autoridades, Dieu Chinh Hung comenzó su nueva vida. En 2007, solicitó un préstamo de 50 millones de dongs (más de 2.000 dólares). Decidió construir una granja para comenzar la ganadería y plantar árboles frutales. El estiércol de sus animales le sirve de excelente fertilizante. Mientras, los árboles de longan y mango se desarrollan muy rápidamente. El propietario compartió: “Hace mucho me pregunté qué podía hacer para tener un ingreso con que sostener a mi familia. Vi que las condiciones climáticas locales eran ideales para la ganadería y la fruticultura y decidí hacerlo. Estaba en lo cierto. Mis vacas me dieron una cría por año. Para mí, la clave del éxito es no dejarlas afuera”.
Si bien la tradición en Vietnam dicta criar ganado al aire libre, Hung elige hacerlo en el establo para reducir el riesgo de enfermedades. Confinado en corrales cómodos, vacunados y alimentados con comida casera concentrada, su rebaño creció rápidamente. Actualmente posee más de diez vacas, pero intenta multiplicar esta cifra. Dijo: "La cría de vacas en el establo garantiza la higiene y evita la proliferación de enfermedades. Realizamos regularmente la supervisión médica. Para aumentar la comida de los animales cultivamos pastos en una superficie de dos metros cuadrados. Les suministramos alimento tres veces al día”.
También cultiva maíz, pescado y aves de corral. Su explotación genera anualmente 150 millones de dongs (alrededor de 6.500 dólares). Comparte voluntariamente su experiencia con los habitantes de la aldea. Uno de ellos, Dieu Van Vinh, salió de la pobreza criando ganado. "Hung me enseñó con entusiasmo a establecer un granero, sembrar pastos y almacenar forraje después de la cosecha. No debemos olvidar vacunar las vacas para prevenir enfermedades”, dio a conocer.
La aldea de He alberga 350 habitantes de la etnia Thai Blanco. Desde 2006, cuando se realizó la reconstrucción local, preserva su título de “Poblado instruido” por no registrar durante años delitos sociales y aunar esfuerzos para salir de la pobreza. Tran Quoc Hung, presidente del comité popular de la comuna de Muong Chien, distrito de Quynh Nhai precisó: "Cuando le pedimos a Hung que ayudara a las otras familias, él accedió de inmediato. Transmitió sus conocimientos y habilidades a los locales y gracias a él, muchos tienen una vida mejor”.
El desarrollo económico de la aldea de He se debe a las considerables contribuciones de su jefe, Dieu Chinh Hung, cuya generosidad y amabilidad se reconocen también en la vida espiritual de esta comunidad étnica.