(VOVWORLD) - Entusiasta y benévola, Ksor H’Nhiem, maestra del jardín de infantes “30 de abril”, logró convencer al 100% de los padres de los alumnos de que inscribieran a sus hijos en la escuela. Si bien en el pasado los habitantes de la provincia de Gia Lai en particular, y de Tay Nguyen (Meseta Occidental) en general, consideraban que la educación era inútil, hoy están predispuestos a ayudar a los docentes a mejorar la calidad de la misma.
 Ksor H’Nhiem, maestra del jardín de infantes “30 de abril”. (Foto: baogialai.com.vn) |
Desde septiembre de 2021, para adaptarse al contexto del covid-19, la escuela “30 de abril”, ubicada en el distrito de Ia Grai en Gia Lai imparte todas las clases a distancia. Desde entonces, Ro Com H’Nanh, de 4 años, sigue cinco veces por semana las lecciones impartidas en línea por su profesora Ksor H’Nhiem. Es su madre, Ro Com H'Lai, quien la ayuda con su tarea, que consiste en grabar videos de canciones y bailes interpretados por su hija y enviárselos a la maestra. Ro Com H'Lai está muy contenta con este método que le ha permitido a su hija aprender muchas canciones nuevas y hermosos bailes a pesar de que la escuela está cerrada.
“Estoy tranquila, porque mi hija es monitoreada regularmente por su maestra. Los cursos en línea están funcionando bastante bien. Hoy mi hija sabe leer, escribir y cantar”, dijo.
Hace tres años, la escuela “30 de abril” era sólo un salón de unos 50 metros cuadrados y en mal estado. Pocos padres enviaban a sus hijos a la guardería infantil. Los demás estaban convencidos de que no era necesario llevar a los niños de 3 a 5 años a la escuela, dijo Ro Cham H’Yui, presidenta de la Asociación de Padres de la aldea de Ia Tong.
En 2018, cuando Ksor H’Nhiem se convirtió en la maestra principal de esta escuela, fue a cada familia del pueblo para explicarles a los padres los beneficios de la clase de guardería. Aquí, además de divertirse, los pequeños pueden aprender a cuidarse, a hablar vietnamita e incluso a leer. Este conocimiento permite que los niños se vuelvan más independientes. Después de darse cuenta de los beneficios de los que sus hijos podrán disfrutar, todos los padres los enviaron a la escuela. Algunos incluso financiaron las obras de renovación del establecimiento. Cham H’Yui, presidenta de la Asociación de Padres de la aldea de Ia Tong, compartió: “Hoy la guardería cuenta con el material escolar necesario y los servicios básicos. Incluso hay un parque infantil de hormigón. Los niños ya no tienen que jugar en el barro y la suciedad. Les encanta ir a la escuela. Estamos muy contentos con estos cambios que se han producido desde la llegada de Ksor H’Nhiem”.
Antes de 2018 el jardín de infantes tenía menos de diez alumnos; hoy, los treinta y ocho niños de 3 a 5 años de la aldea están inscriptos en la escuela. Todos son del grupo étnico Jrai, pero ahora hablan vietnamita con fluidez. A su vez, fueron introducidos a varios instrumentos musicales tradicionales y a la vestimenta de su grupo étnico. Sin Ksor H’Nhiem, estos cambios no se habrían producido, dijo Do Thi Nga, rectora de la guardería infantil “30 de abril”.
“Dedicada, entusiasta, paciente y sonriente, Ksor H’Nhiem es una excelente maestra. Durante varios años, ha sido una de las maestras más calificadas de la provincia de Gia Lai. También participa activamente en la enseñanza del idioma vietnamita a las minorías étnicas”, señaló.
Humilde y altruista, Ksor H'Nhiem simplemente quiere educación para ayudar a los niños Jrai a tener un futuro mejor.
“Nuestro pueblo está ubicado en una región muy pobre. Muchos padres no pueden cubrir los gastos escolares de sus hijos. Así que muy pocos niños pueden recibir una buena educación. Es una triste realidad. Mi mayor deseo es que todos los niños de minorías étnicas puedan ir a la escuela y hablar vietnamita con fluidez”, expresó.
Hoy, su mensaje ha sido escuchado y su dedicación ha sido recompensada. Ksor H'Nhiem fue honrada como "Profesora ejemplar del año escolar 2020-2021" por su servicio de educación brindado a la provincia de Gia Lai.