(VOVworld) – La aldea subterránea Vinh Moc, en la provincia central Quang Tri es un famoso sitio turístico por su originalidad sin par. Durante los años encarnizados de guerra, los túneles de este villorrio protegieron a decenas de miles de pobladores. Pocas personas saben que el inventor de esta iniciativa insólita todavía no había terminado la enseñanza primaria.

Le Xuan Vi, inventor de túneles de Vinh Moc

En la guerra contra el imperialismo norteamericano, a mediados de los años 60 del siglo XX con su posición estratégica en la primera línea de combate, la zona Vinh Linh sufrió el lanzamiento de una gigantesca cantidad de bombas y proyectiles de los ejércitos de Estados Unidos y la antigua República de Vietnam. En ese tiempo Le Xuan Vi era jefe del puesto de policía en Cua Tung. Comprendiendo la atrocidad de la guerra y deseando disminuir las pérdidas provocadas por las bombas y proyectiles Vi trataba de buscar medios para proteger al pueblo y la iniciativa de construir una aldea subterránea apoyada en el principio de los túneles en forma de la A y U surgió. A principios de l966 la policía y el pueblo empezaron a excavar refugios en Vinh Giang, Vinh Moc, Son Ha y otras zonas de Vinh Linh. Él dirigió directamente este trabajo. “Si usamos los bambúes y hormigón para cercar las aldeas de combate éstos no serán sólidos y solo la voluntad del pueblo resultaba más firme. Sin embargo, en ese momento los villorrios de combate ya fueron atrasados y sustituidos por los refugios subterráneos en forma de la A y U. Dije a mis compañeros que se necesitaban armamentos para combatir a los yanquis, pero no teníamos, por lo tanto debíamos equipar al pueblo con la tierra. Donde hay tierra rojiza podemos excavar túneles y estos son las armaduras del pueblo.”

La entrada a los túneles de Vinh Moc

Ahora, con más de 80 años de edad, Vi recuerda aún los tiempos en que su vida se ligaba a los túneles de Vinh Moc. Dijo que los instrumentos de excavación eran guatacas, palas y soportes colgantes. El medio técnico más moderno era una vieja brújula. Mientras sus compañeros excavaban túneles, sobre su cabeza el enemigo continuaba lanzando bombas. Desafiando las dificultades y penalidades, con la determinación de “no ceder ni una pulgada de tierra”, el pueblo de Vinh Linh estaba decidido a aferrarse a la tierra para producir, combatir, abastecer y defender la isla Con Co y aportar fuerzas humana y material al sangriento campo de batalla sureño,  haciendo un milagro bajo tierra. Vi contó: “Al principio no teníamos suficientes fuerzas para excavar túneles profundos. Entonces ahondamos refugios en forma de U y reforzamos los caminos con la tierra movida para aumentar la profundidad de los túneles. Sobre estos se cultivaron bambúes para camuflar y se abrieron numerosos respiraderos y cada uno de estos estaba a 50 metros del otro. Para socavar la obra subterránea tuvimos que calcular bien para que los segmentos del túnel se encontraran.”

Turistas en los túneles de Vinh Moc

Han transcurrido cerca de 50 años, Le Xuan Vi todavía no olvida cada detalle de los días difíciles. El rememoró: “Al principio mis compañeros no creían en el éxito del trabajo, pero como jefe trataba de cumplir mi tarea y no dejar que ocurrieran accidentes laborales. Nos dividimos en 3 grupos de 3 a 5 personas cada uno. Cada 25 metros descansábamos e hacíamos turnos para mover la tierra.”

Figuras de miembros de una familia en los túneles de Vinh Moc

Muchos niños nacen bajo tierra

Aunque ha escuchado muchos relatos de su padre sobre los túneles, Le Xuan Hoa, hijo menor de Vi se asombró al visitarlos. Él dijo: “Mi padre nos contó sobre la construcción de refugios, así como de la medición y cálculo. Según él, para que el enemigo no los descubriera se empleaban bambúes para camuflar y cuando se cocinaba el humo salía y volaba a baja altura como la niebla. En l999 bajé por primera vez a estos túneles y mi impresión fue difícil de describir. Tenía dudas de cómo se pudieron unir los segmentos de refugios subterráneos con el eje principal con absoluta exactitud.

Plano de los túneles de Vinh Moc

Ahora, al contar a sus hijos y nietos sobre estos Vi dijo que la felicidad de su vida fue que en l967 su primer hijo nació allí. Como persona de grandes méritos en el diseño y construcción de la obra subterránea legendaria siempre considera sus aportes como un hecho normal. Compartió que en esa situación de la excavación de túneles para que miles de personas pudieran evitar las pérdidas causadas por las bombas y proyectiles encarnizados del enemigo fue una gran felicidad para él. Esto explica por qué los lugareños lo llaman “Abanderado en la excavación de túneles, milagro de Vinh Moc.”