(VOVWORLD) - La comuna de My Tra, que pertenece a la ciudad de Cao Lanh, en la provincia sureña de Dong Thap, es famosa por el oficio tradicional del tejido de bambú, con más de 100 años de preservación y desarrollo. Aunque hubo un período en que esta artesanía enfrentaba el riesgo de desaparición, los artesanos se esforzaron por superar los altibajos, y hoy el oficio ha resurgido con fuerza, brindando ingresos estables a los habitantes locales.
Aunque no es difícil tejer esteras de bambú (me bo), pero el oficio requiere mucho tiempo y una elaboración meticulosa. (Foto: vovgiaothong.vn) |
"Me bo" es el nombre de un producto artesanal hecho de bambú de diferentes especies que los artesanos cortan en tiras largas y tejen para formar una gran estera de tamaño predefinido. En el Suroeste de Vietnam, estos paneles de bambú son muy populares. Se utilizan como recipientes para el arroz, como divisores en las casas e incluso como material de amortiguación para los barcos. Estos productos también se exportan a Camboya, donde se utilizan para la conservación del arroz.
En la comuna de My Tra, los artesanos continúan produciendo esteras a diario. Cada día, un artesano, incluso entre los de avanzada edad, puede tejer entre ocho y diez piezas. Varios artesanos locales expresan su contento al poder seguir el oficio legado por los ancestros.
"Soy viejo y ya es difícil conseguir un trabajo. Para mí, tejer esteras de bambú es bastante simple y me conviene para ganar ingresos”, dijo un hombre.
"Es difícil ahora que algunas empresas o entidades me quieran contratar para trabajos forzosos ni para trabajos en oficina. Pero sí puedo ganar dinero con el tejido de bambú los días que mis condiciones de salud lo permiten”, manifestó una mujer.
Con más de 80 años de vida, Nguyen Van Mo tiene 70 años dedicándose a esta profesión. Siete de sus ocho hijos aprendieron la artesanía y han decidido continuar con ella hasta el día de hoy, a pesar de los altibajos que han enfrentado.
“Casi todos los aldeanos tejen paneles de bambú para obtener ingresos adicionales. Tejiendo a mano, no se puede ganar mucho, así que ahora usamos máquinas. Mi esposo y yo ganamos alrededor de 100 mil dongs (4 dólares) al día después de deducir todos los gastos. Usar las máquinas hace que el trabajo sea mucho más fácil”,explicó Mo.
Un tejedor o una tejedora de paneles de bambú gana entre 80 mil y 140 mil dongs (de 3 a 6 dólares) al día. (Foto: laodong.vn) |
Las tareas se dividen entre las personas. Los hombres parten el bambú, mientras que las mujeres tejen los paneles. El bambú debe remojarse en agua durante medio día antes de ser cortado en tiras. Luego, se deja secar durante un día para facilitar el corte en tiras más delgadas.
El proceso más complicado es separar las tiras de la cáscara exterior del bambú. Estas tiras se utilizan para confeccionar esteras de primera calidad, que son más costosas que las elaboradas con tiras del núcleo del bambú. Las últimas son más económicas porque son menos duraderas.
Un tejedor de paneles de bambú gana entre 80 mil y 140 mil dongs (de 3 a 6 dólares) al día. La familia de Le Thi Phien ha salido de la pobreza realizando diversos trabajos, incluido el tejido de esteras de bambú.
“Mis padres se ganaban la vida con este oficio. Yo los seguí y, con el tiempo, me fui interesando más en él. Cuando formé mi propia familia, comencé a trabajar en los campos de arroz durante la temporada de cosecha. Cuando la cosecha termina, me dedico al tejido. Con mi experiencia, puedo tejer cualquier tipo de panel”, dijo Phien.
Anteriormente, este oficio permitió que muchas familias locales prosperaran, ya que había una gran demanda de paneles para fabricar silos de arroz, paredes y puertas. Actualmente, los paneles de bambú están nuevamente en demanda para proyectos de construcción y para secar frutas antes de la temporada del Año Nuevo Lunar.
Más de 170 hogares en la comuna de My Tra y 20 en el barrio de My Phu están dedicados a esta actividad. Vo Van Tho, quien ha estado tejiendo paneles de bambú durante 30 años, dijo lo siguiente: “Este oficio puede ser el trabajo principal de una persona. Los paneles se venden bien. Si la superficie de una carretera está dañada, la gente compra unas docenas de paneles y mezcla tierra con ellos para reparar el camino”.
En 2003, el Comité Popular de la provincia de Dong Thap reconoció oficialmente a la comuna de My Tra como como un pueblo de oficio tradicional de tejido de bambú. Hoy en día, estos paneles son cada vez más solicitados en el mercado nacional, especialmente en las provincias sureñas de An Giang, Kien Giang y Tien Giang, e incluso, en un mercado extranjero como Camboya.