(VOVWORLD) - Este domingo marcó la integración parcial de Bulgaria y Rumania al espacio Schengen, tras 13 años de acelerar reformas para adaptarse a las normas establecidas por la Comisión Europea al respecto.
Según el acuerdo alcanzado con los otros miembros de la Unión Europea (UE) a finales del año pasado, a partir del 31 de marzo de 2024 esos dos países pueden dejar de aplicar las medidas de control fronterizo, lo que permite la libre circulación de sus ciudadanos y los de otros países dentro del espacio Schengen por vía marítima y aérea. No obstante, se mantendrán los controles en las fronteras terrestres debido al rechazo de Austria por las preocupaciones de olas migratorias desde Europa Oriental.
Aun así, este acuerdo es considerado una victoria para Sofía y Bucarest. El primer ministro búlgaro, Nikolai Denkov, declaró: “Schengen no es una valla a lo largo de la frontera. Se trata ante todo de la confianza, porque podemos proteger las fronteras de la UE, tanto la frontera exterior entre la UE y Turquía como las fronteras en aeropuertos, puertos y puertas fronterizas. Schengen es una prueba de que Bulgaria avanza con confianza por el camino europeo”.
De esta manera los miembros del espacio Schengen, la mayor zona de libre circulación del mundo, suman 29, incluidos 25 de los 27 Estados integrantes de la UE, junto a Suiza, Noruega, Islandia y Liechtenstein.