(VOVWORLD) - El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) endureció este 22 de diciembre sus sanciones contra Corea del Norte al aprobar la Resolución 2397 con el fin de reducir aún más sus oportunidades de financiación desde el extranjero.
El texto limita a 500 mil barriles al año los productos refinados que pueden entrar al país, lo que recortará en un 89% las importaciones norcoreanas de gasolina, diésel y otros combustibles. Además, exige a todos los países miembros de la mayor organización mundial repatriar a los migrantes laborales norcoreanos dentro de 12 meses.
La resolución recortará también las exportaciones norcoreanas, que ya estaban muy limitadas por anteriores sanciones, extendiendo el veto a sectores como el alimentario, el agrícola o los equipos eléctricos. Actualmente las prohibiciones ya cubrían ámbitos que generaban a Pyongyang una pérdida del 90% de sus ingresos por exportación, por lo que el impacto de las nuevas medidas será únicamente de unos 250 millones de dólares al año.
El secretario general de la ONU, Antonio Guterres, felicitó al Consejo por la unanimidad, condición “esencial” para lograr la desnuclearización y abrir espacio a las iniciativas diplomáticas. Por su parte, el presidente estadounidense, Donald Trump, evaluó que la comunidad internacional está esforzándose por una paz con Pyongyang. Mientras, Rusia afirmó su posición cooperativa para aliviar las tensiones en la Península Coreana.