(VOVWORLD) - Los egipcios comenzaron hoy a votar en las elecciones presidenciales de 2024, que se celebrarán hasta el 12 de diciembre, para elegir al líder del país para el próximo mandato.
El presidente en funciones Abdel Fattah El Sisi es el candidato más ventajoso en las elecciones presidenciales de Egipto. (Foto: Getty Images) |
Los cuatro candidatos en este sufragio incluyen el actual presidente Abdel Fattah El Sisi y el jefe del Partido Socialdemócrata Egipcio (PSE), Farid Zahran; el líder del Partido Wafd, Abdel Sanad Yamama; y Hazem Omar, del Partido Popular Republicano (RPP).
En aras de garantizar el éxito del evento, la Comisión Electoral Nacional de Egipto (ANE) ha preparado miles de urnas móviles, además de las fijas, en más de 9.300 colegios electorales en todo el país. Más de 22.300 observadores participaron en el seguimiento de las elecciones y más de 4.200 reporteros de 115 agencias de prensa nacionales e internacionales tienen el permiso para realizar la cobertura mediática de las presidenciales.
Los resultados oficiales del recuento de votos serán anunciados por la ANE el 18 de diciembre. Si ningún candidato obtiene más del 50% de los votos para ganar, se celebrará una segunda vuelta a principios de enero de 2024.
Según las evaluaciones de analistas egipcios y de la región, el presidente El Sisi tiene una alta posibilidad de obtener un triunfo decisivo en la primera vuelta.
Las elecciones presidenciales de Egipto tienen lugar en un contexto en que su economía sigue enfrentando muchas dificultades debido al impacto negativo del conflicto Rusia-Ucrania y la pandemia de covid-19, mientras que la moneda local se desplomó en comparación con el dólar. La inflación siempre ha promediado por encima del 30% desde principios de 2023 hasta ahora.
Por otro lado, la seguridad de Egipto también enfrenta muchos desafíos serios en una región llena de inestabilidad. Por lo tanto, elegir un líder capaz de sacar a Egipto de su difícil situación económica actual, así como de mantener la seguridad y la estabilidad del país, es la principal preocupación de los votantes egipcios.