El presidente irlandés, Michael D. Higgins (d), y su esposa se toman una fotografía con el secretario general del Comité Central del Partido Comunista y presidente de Vietnam, To Lam.

En su intervención, Michael D. Higgins, mostró su esperanza de que la visita de To Lam contribuya a mantener y fortalecer la amistad y el creciente desarrollo de los dos países.

D. Higgins aprovechó esta oportunidad para expresar su solidaridad con el máximo líder de Vietnam y, a través de este dirigente, compartir las pérdidas y los daños causados por el tifón Yagi al pueblo vietnamita.

“Irlanda es un socio de desarrollo a largo plazo de Vietnam, y se compromete a apoyar los esfuerzos de recuperación humanitaria”, enfatizó.

Michael D. Higgins destacó el papel de Vietnam como uno de los cuatro países que participan a nivel mundial en la Asociación para una Transición Energética Justa apoyada por la determinación de la Unión Europea (UE) de enfrentar y liderar la respuesta global al cambio climático, con el objetivo de transformar las posibilidades de las energías renovables en esta nación del Sudeste Asiático.

El dirigente irlandés enfatizó la importancia de Vietnam para la seguridad regional, incluidos los enfoques diplomáticos no alineados y la política de los “Cuatro No”: no alianzas militares, no unirse a un país para luchar contra otro, no tener bases militares en el extranjero o utilizar Vietnam como palanca para contraatacar a otros países y no utilizar la fuerza ni amenazar con su uso.

“Esta estrategia no alineada y las relaciones sanas y equilibradas con las principales potencias han traído grandes beneficios a Vietnam”, manifestó.

El presidente Michael D. Higgins expresó su convicción de que las relaciones con Vietnam se estrecharán cada vez más.