El mismo día, después de la última reunión con Letta, el gabinete italiano se disolvió, abriendo el camino al establecimiento de un nuevo gobierno. Este acontecimiento ocurrió un día después de la reunión extraordinaria del Partido Demócrata (PD) en el poder con la conclusión de demover a Letta,  quien es militantes del mismo partido. El resultado de una votación en esta sesión permitió a conocer que el PD apoya la candidatura del actual alcalde de Florencia, Matteo Renzi, al cargo de jefe del ejecutivo italiano. Si no hay cambio, el nuevo gabinete se formará en la próxima semana y Renzi tiene numerosas posibilidades de convertirse en premier.

El mismo día, el estadista George Napolitano empezó a consultar a los partidos políticos sobre la creación del nuevo gobierno tras la renuncia del gabinete de Enrico Letta.