(VOVWORLD) - Continuando con una serie de sangrientos combates transfronterizos que duraron más de 11 meses, ayer el ejército israelí y el Movimiento Hezbolá en el Líbano lanzaron ataques más feroces contra las fuerzas opuestas, aumentando el riesgo de que estalle un conflicto integral con muchas consecuencias impredecibles para toda la región.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) informaron anoche que durante el día, la fuerza aérea del país atacó muchos objetivos del grupo Hezbolá en el sur del Líbano, incluido un edificio en el área de Kawkaba, un punto de recolección de armas y un lanzacohetes y varias estructuras en las zonas de Majdal Zoun, Jebbayn y Blida.
 Cerca de la frontera entre Israel y el Líbano. (Foto: Reuters) |
Por su parte, Hezbolá anunció que había lanzado decenas de misiles para atacar una base de la fuerza aérea israelí en la zona de Safed, situada a unos 12 kilómetros de la frontera libanesa.
Preocupado por el riesgo de un conflicto en toda regla entre Israel y Hezbollah, el gobierno de Estados Unidos decidió enviar representantes de regreso a Medio Oriente para encontrar formas de enfriar las tensiones.
El enviado especial de Estados Unidos para Medio Oriente, Amos Hochstein, estará en Israel el próximo lunes para debatir con los líderes del país medidas para enfriar los combates a lo largo de la frontera entre Israel y el Líbano.