(VOVWORLD) - Unas 20.000 personas participaron este domingo en una marcha en la ciudad de Palma, en Mallorca, para protestar contra el sobreturismo y pedir cambios en el modelo turístico que está perjudicando a esta hermosa isla.
Los manifestantes, portando banderas y pancartas de colores, marcharon por las calles más concurridas de la ciudad, expresando su frustración por el impacto negativo de la industria en las comunidades locales.
Se trata del último hecho de la ola de “antiturismo” que se está produciendo con fuerza en muchas localidades de España.
Unas 80 entidades y colectivos sociales han convocado a la población a participar en marchas exigiendo restricciones al turismo excesivo en las Baleares, que cuenta con tres islas principales: Mallorca, Menorca e Ibiza.
Los manifestantes argumentan que el modelo turístico actual está causando sobrecargo a los servicios públicos, degradando el medio ambiente natural y dificultando que la población local encuentre vivienda.