El presidente ruso, Vladimir Putin, estrecha la mano con el presidente de Siria, Bashar el Asad, en Sochi (Foto: EFE)

En su declaración emitida por el Kremlin después de dicha cita, Putin dijo que después de los logros militares del ejército de dicho país de Oriente Medio en los últimos meses, se han registrado nuevas condiciones suficientes para comenzar nuevamente un proceso político que había iniciado tiempo atrás. Según el dignatario, los terroristas dejaron las armas en las áreas principales de Siria, lo que permitió la recuperación de las infraestructuras locales. Si dicho itinerario avanza al máximo, las fuerzas armadas extranjeras se retirarán del territorio antes mencionado, aseveró Putin sin identificar ninguna de ellas. Además, el mandatario ruso destacó el objetivo común de reconstruir la economía de Siria y suministrar ayuda humanitaria. También reveló que Moscú ha contactado con todas las partes involucradas, incluida la ONU para promover dicho proceso político “complicado”.

Entretanto, el presidente de Siria, Bashar al-Assad afirmó que la reunión con su homólogo del país euroasiático es una oportunidad para fomentar la visión conjunta al servicio de las próximas negociaciones de paz en Astana (Kazajistán) y Sochi (Rusia). También confirmó los cambios positivos en las zonas cada vez más reducidas de la amenaza de los terroristas, lo que permitió el regreso de cientos de miles de ciudadanos sirios a su casa.