El secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, en una conferencia de prensa en Nueva York, Estados Unidos. (Foto: Xinhua/VNA)

Según anunció la delegación permanente de Malta, país que ostenta la presidencia rotatoria del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, este organismo convocará una reunión de emergencia este domingo para discutir la reciente acción militar de Irán.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, emitió anoche una declaración condenando el ataque con drones librado por Teherán contra Israel. Informó además que reiteró en una conversación con el primer ministro israelí Benjamin Netanyahu el firme compromiso de Washington con la seguridad del país hebreo. Biden también anunció que convocará hoy una reunión con los líderes del Grupo de Países Industrializados (G7) para considerar una respuesta diplomática unificada a la acción militar de la República Islámica.

Mediante una declaración publicada en la página web del Ministerio de Relaciones Exteriores, China expresó su profunda preocupación por la escalada de la situación tras la medida de represalia de Irán, y pidió a las partes pertinentes mantener la calma y moderación. Beijing catalogó esta espiral de tensión como un “derrame de petróleo” derivado del conflicto entre el movimiento islámico Hamás e Israel. Por lo tanto, poner fin a este conflicto es la máxima prioridad, manifestó.

Italia, un país mediterráneo y a menudo afectado por tensiones geopolíticas y oleadas de refugiados debido a los conflictos en Oriente Medio, expresó su inquietud por este acontecimiento. El ministro italiano de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, afirmó que sigue de cerca el conflicto “con atención y preocupación”.

El canciller francés, Stéphane Sejourne, dijo que se trata de un “nuevo grado de tensión de seguridad”, al tiempo que subrayó que París rechaza categóricamente este ataque.

Actualmente, muchos de los países vecinos de Israel han cerrado su espacio aéreo por motivos de seguridad, incluidos Irak, Jordania y Egipto. Estos países expresaron preocupación por una posible guerra generalizada en Medio Oriente, y pidieron a las partes actuar con moderación y no permitir que la situación se salga de control.