(VOVworld) – El presidente de Siria, Bashar al-Assad aceptó el 12 de septiembre colocar el arsenal químico de ese país bajo control internacional. Al conceder entrevistas a la Televisión nacional Rossiya 24 de Rusia desde Damasco, capital siria, Assad afirmó que su decisión se debe a Moscú, y no a las amenazas de Washington. Destacó además que cualquiera guerra contra Damasco significará la destrucción de la región, hundida en la inestabilidad durante décadas.

Según la iniciativa adelantada por Rusia, Siria participará en la Convención para la Prohibición de Armas Químicas, anunciará la ubicación y el origen de su arsenal químico, autorizará a los inspectores internacionales a chequearlo, con quienes finalmente coordinará su destrucción.

El mismo día, el portavoz de la ONU, Farhan Haq informó haber recibido la confirmación de Damasco de adherirse al Tratado. De acuerdo con Farhan Haq, dentro de pocos días Siria se convertirá en miembro de la Convención de Prohibición de Armas Químicas de 1993.

En otro acontecimiento relacionado, el 12 de septiembre, el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry y su homólogo ruso, Sergei Lavrov llegaron a Ginebra, Suiza para discutir durante dos días sobre la propuesta de Moscú de eliminación del arsenal químico de Siria. En vísperas del diálogo, Kerry reafirmó que su gobierno considerará el uso de fuerzas contra Damasco de no cumplirse la eliminación de armas químicas. Por su parte, el jefe de diplomacia rusa Lavrov recalcó que Moscú exhorta a Washington a poner fin a las amenazas de intervención militar en el actual momento y al mismo tiempo propone un arreglo negociado del conflicto interno en Siria.