(VOVWORLD) - El Consejo de Seguridad Nacional de Corea del Sur convocó el 24 de agosto una reunión emergente para analizar la situación tras el disparo por parte de Corea del Norte de dos proyectiles no identificados hacia el mar de Japón este sábado, el séptimo lanzamiento en solo un mes.
Los altos funcionarios militares surcoreanos expresaron la preocupación y exhortaron a Pyongyang a dejar las acciones que aumentan las tensiones en la zona. También acordaron fortalecer los esfuerzos diplomáticos y la colaboración con la comunidad internacional para disuadir a Corea del Norte de volver a la mesa de negociaciones, con el fin de alcanzar la desnuclearización completa de la península coreana.
El mismo día, el Gobierno de Japón informó que los fragmentos de misiles disparados por Pyongyang no cayeron en su territorio ni zona económica exclusiva. A pesar de ello, denunció ese acto como una violación de las resoluciones de la ONU.
Por su parte, Estados Unidos dijo seguir de cerca la situación y mantener frecuentes consultas con Tokio y Seúl.