(VOVworld) – El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro decidió el 21 el febrero repatriar a la embajadora en Holanda, Haifa Aissami después que la oficina consular en la isla de Aruba sufriera ataques, además de cerrar y retirar el cuerpo diplomático en las islas de Curazao y Bonaire, todas pertenecientes al territorio holandés en el mar Caribe. La decisión se tomó un día después de que un residente venezolano en Aruba chocara un vehículo contra la sede consular allí. No obstante, el asalto no provocó pérdidas humanas y materiales. El canciller de Venezuela, Elías Jaua informó que Caracas urgió a Ámsterdam a extraditar al autor del atentado al órgano jurídico del país bolivariano para enjuiciarlo. Dio a conocer que la orden del cierre de las oficinas consulares y la repatriación del cuerpo diplomático nacional surten efecto hasta que Holanda pueda garantizar la seguridad humana y material para los funcionarios venezolanos.