(VOVworld) – Sólo quedan unas horas para el comienzo del Nuevo Año Lunar. Como en todo Vietnam, el pueblo de Hanoi ultima los preparativos para dar la bienvenida al nuevo año.
El año nuevo está llegando
La tarde del día 30 del decimosegundo mes del año de la serpiente. Las calles de Hanoi están vacías. Los principales centros comerciales están cerrados. Sin embargo, en los mercados agropecuarios se experimenta una sensación de prisa. Las amas de casa apresuran la compra de ingredientes frescos para la comida de fin de año y la comida de celebración del Nuevo Año. La feria de fin de año es más animada, pero los mercados cierran más temprano que en los días normales, a las 17 horas.
La cena de fin de año está llena de valores familiares. Todos los miembros no importa cuan lejos vivan, deben volver a casa para unirse en este importante momento. Toda la familia se sienta junta. Do Thanh Hoa está preparando la fruta para la comida. Ella nos dejó saber: “La comida de fin de año es indispensable. Es la única ocasión del año para que todos los miembros de la familia se reúnan. Después de la comida, empezamos a preparar la cena de Año Nuevo para ofrecerla a nuestros antepasados. Cada uno de la familia tiene que participar en la preparación. A las 23 horas, las dos bandejas de ofrendas dentro de la casa y al aire libre deben estar terminadas. A media noche, quemamos incienso para invitar a los espíritus de nuestros antepasados a volver a casa.”
En los días previos al día de año nuevo, las calles de Hanoi permanecen bulliciosas. En el último día del año de la serpiente, hay cierta tranquilidad y el vacío. Algunas personas todavía están en la calle para realizar la última compra del año.
La madre y sus hijos disfrutan del ambiente del Tet en las calles
Do Tien Loi, vecino de la calle del Ham Long dijo: “Yo estaba ocupado en el trabajo y sólo tengo tiempo libre hoy para empezar a comprar cosas para la celebración del año nuevo. Cada año compro flor de durazno y árbol de kumquat, las plantas indispensables durante la celebración del Tet.”
Los compradores y los vendedores están de prisa por volver a casa y preparar la comida del nuevo año. Nguyen Thi Bac, proveedor de kumquat en la calle Hang Luoc dijo:
“Vendí el último árbol de kumquat por un precio muy barato. Quiero deshacerme de él para volver a casa pronto.”
Es el último día del año de la serpiente, pero las estaciones de autobús y tren siguen saturadas. Los que viven fuera de la casa familiar están esperando ansiosamente el último autobús o tren para llegar allí antes de que entre el nuevo año. Cada uno lleva regalos de año nuevo. Nguyen Bich Thuy, una estudiante que trabaja tiempo extra para ganar dinero y vuelve a casa tarde, expresó: “Estaba inquieta viendo a la gente prepararse para el Tet. Gano algo de dinero para comprar regalos para mis padres. Ahora quiero volver a casa tan pronto como sea posible.”
Como la gente está preparando las nuevas comidas, los que se ocupan de la limpieza de calles están en sus momentos de mayor actividad. Gran cantidad de basura que se vierte en estos días aumenta su carga laboral.
Una familia recorre las calles en ocasión del Tet
Le Thi Thom , una trabajadora sanitaria dijo que su carga de trabajo se ha duplicado desde hace una semana en el advenimiento del Año Nuevo Luna. “El Tet de este año es el décimo que celebro junto con mis compañeros de trabajo en las calles en vez de estar con nuestras familias. Tenemos que mantener las calles limpias antes del año nuevo. Siempre regreso a casa a la madrugada.”
A medida que el reloj está en marcha para el nuevo año que viene, las calles del centro de Hanoi se llenan de gente, al contrario de lo desierto de la mañana. Las personas se reúnen en los conciertos musicales al aire libre o buscan los mejores lugares para ver los fuegos artificiales a la medianoche.
El año nuevo está llegando. Los que no podían regresar a sus hogares dirigen corazones y mentes a sus familias, incluyendo los soldados estacionados en las islas. Teniente Nguyen Huu Tang está acuartelado en la isla de la Song Tu Tay del archipiélago de Truong Sa (Spratly) desde hace tres años. Él dijo: “Los residentes de la isla y combatientes se reúnen en la casa de cultura para celebrar juntos el año nuevo. No puedo celebrar el año nuevo con mi familia, pero tengo a los isleños y los soldados para una feliz celebración del año nuevo.”
El reloj marca la medianoche. No importa lo ocupado que estén, la medianoche es el momento en que todas las actividades deben cesar para que cada uno sienta el momento sagrado, la llegada del año nuevo.