(VOVworld) - Tras casi dos meses de fundación, el Club de voluntarios del Museo de Historia Nacional de Vietnam atrae cada vez a más jóvenes para convertirse en un verdadero puente entre el público y la casa museo. Con su dinamismo y creatividad en el desempeño, estos jóvenes voluntarios renuevan el ambiente del museo, despertando y estimulando mayor interés por la historia y la cultura nacional.

Unos 80 voluntarios del Museo de Historia Nacional trabajan todos los días de la semana con mucho entusiasmo. Son estudiantes de diferentes colegios y universidades en Hanoi que comparten el afán de conocer y divulgar más sobre la historia y la cultura de la nación. Durante los últimos dos meses, han contribuido a divulgar con eficiencia las imágenes y actividades del museo mediante artículos y cortometrajes elaborados por ellos mismos. Le Vu Thuy Hau, estudiante de tercer año de la Universidad de Comercio Exterior espera enriquecer aún más sus conocimientos de historia al participar en las actividades del Club.“Es importante preservar y desarrollar la cultura de una nación. Cada país tiene su propia idiosincrasia y sus rasgos culturales peculiares y yo quisiera presentar la originalidad de la cultura y la historia de Vietnam a los amigos del mundo en cuanto tenga la oportunidad”, expresó Hau.

Mediante los archivos y objetos expuestos en el museo, los integrantes del Club pueden profundizar más en la historia y la cultura de la nación. El Club les proporciona también la ventaja de encontrarse e intercambiar con los historiadores prestigiosos del país, y entrenarse en idiomas extranjeros con otros voluntarios y turistas extranjeros que visitan el museo. Esto es lo que fascina a Nghiem Thu Ha, estudiante de cuarto año de la Facultad de francés de la Universidad nacional de Hanoi al inscribirse en este Club.“Los estudiantes ahora tienen muchos intereses pero pocos se  sienten atraídos por la historia, eso es una realidad. Nosotros, como estudiantes de idiomas extranjeros, no tenemos muchas clases de cultura e historia. Por eso, las actividades del Museo de Historia Nacional nos alientan a conocer más de la cultura y la historia del país. Si los vietnamitas dominan conocimientos de esta índole, contribuyen  a difundir las imágenes del país”.

Por su parte, Phan Thu Ha, estudiante de cuarto año de la Universidad de Economía nacional se involucró en las actividades del Museo mucho antes de su integración en el Club. Ha compartió que gracias al Club, tiene nuevas amistades y acumula preciosas experiencias. Reconoció las dificultades para mantener las operaciones del Club pero confió en que con tesón y amor, ella y otros voluntarios pueden superar cualquier reto.“Es difícil llamar la atención de los jóvenes para que se interesen más en la historia sin deformar las informaciones. A veces nos sentimos un poco desanimados, pero como dice el proverbio: la necesidad aguza el ingenio, y parece que las dificultades nos incitan más, para vencer los obstáculos”.

Phan Thu Ha consideró el museo como un canal de estudio por excelencia para los jóvenes, por eso, abriga el deseo de construir una red de conexión de voluntarios de todos los museos en Vietnam. To Thi Thuy Lam, jefa del Club de voluntarios y vice jefa del Servicio de Comunicaciones del museo consideró a los voluntarios como los embajadores dinámicos de esta casa museo.“Se trata de jóvenes capaces y muy aficionados a la historia y la museología. Al realizar actividades eficaces, constituyen un alargado brazo de las funciones de nuestro museo. Creo que ellos son embajadores que representan a los jóvenes para desempeñar la divulgación sobre la preservación y el enaltecimiento de los valores culturales e históricos de la nación”.

Tal como los modelos previamente establecidos “Amo la historia” y “Clase de historia” para los alumnos del grado primario al preuniversitario, el Club de voluntarios del Museo de Historia Nacional creó un espacio instructivo que anima la participación de los jóvenes en las actividades culturales y promociona la afición por la historia nacional, para de ahí forjar su personalidad, moral y espiritual y defender la dignidad de la nación.