(VOVworld) – Además de instalar ilegalmente la plataforma de perforación petrolera Haiyang Shiyou 981 en la zona económica exclusiva y plataforma continental de Vietnam, China tergiversó la misiva del difunto primer ministro vietnamita, Pham Van Dong emitida en 1958 para argumentar que Hanoi reconoció la soberanía de Beijing sobre los archipiélagos de Hoang Sa (Paracel) y Truong Sa (Spratly). De esta manera, el doctor Nguyen Toan Thang, encargado de la asignatura de legislación pública internacional en la Universidad de Derecho de Hanoi calificó de “jurídicamente errónea” la acción de China para reivindicar estos territorios insulares.
El 4 de septiembre de 1958, China declaró unilateralmente su soberanía marítima en el contexto en que la primera conferencia sobre el Derecho del Mar de la ONU no logró un consenso sobre la definición de la anchura de las aguas territoriales de la región. Como consecuencia, los países involucrados presentaron sus propias reclamaciones. Estados Unidos propuso 3 millas náuticas mientras otros estados sugirieron 4,5. Por su parte, China declaró 12 millas náuticas. El 14 de septiembre de 1958, el entonces primer ministro de la República Democrática Popular de Vietnam, Pham Van Dong envió una misiva a su homólogo chino, Zhou Enlai en la que afirmó: “El Gobierno de la República Democrática Popular de Vietnam reconoce y apoya la declaración del Gobierno de la República Popular de China emitida el 4 de septiembre de 1958 que define las aguas de China”…
Interpretación tergiversada contra la ley internacional
La misiva de Pham Van Dong
Al interpretar la carta de Pham Van Dong, Beijing opinó que la declaración de 1958 sobre las aguas chinas muestra que la anchura de 12 millas náuticas abarca todas las islas del país, entre ellas, los archipiélagos de Xisha y Nansha (o Hoang Sa y Truong Sa de Vietnam), respectivamente. La misiva reconoce y respalda la decisión sobre las aguas chinas y por lo tanto quiere decir que reconoce y apoya la política territorial de Beijing construida en base a la soberanía nacional.
Sin embargo, el doctor Nguyen Toan Thang afirmó que la declaración de China emitida el 4 de septiembre de 1958 trata de las aguas territoriales, es decir sobre la región marítima, no acerca de la soberanía nacional. Además, la carta de Pham Van Dong señala el reconocimiento de la anchura de las aguas chinas de 12 millas náuticas pero no se puede igualar este asunto al concepto de la soberanía nacional de China porque son dos temas diferentes. En este sentido, la anchura de las aguas nacionales reclamadas por Beijing no tiene nada que ver con la conclusión de que China tiene la soberanía nacional sobre todas las islas pertinentes de la región que reivindicó. Entretanto, la declaración de 1958 no es suficiente para afirmar la soberanía china sobre sus territorios insulares reivindicados. De esta manera, no se puede deducir conclusiones de que Beijing reclamó sus aguas nacionales que incluían los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa de Vietnam y esto significa que estos territorios insulares forman parte de la soberanía de China. Según a la ley internacional, dicha declaración unilateral del gigante asiático no tiene el valor jurídico para otros países involucrados. Según el principio: “La tierra domina el mar”, las aguas se forman sobre la base de los territorios terrestres o insulares. Sin embargo la reivindicación unilateral de las aguas de un país no entrega a sí mismo la soberanía nacional.
Misiva del 1958 no abandona la soberanía nacional de Vietnam sobre los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa
Soldados de las fuerzas navales de Vietnam del Sur están decididos a sacrificarse
para defender la soberanía nacional contra los invasores chinos
En la actualidad, en 1954, el territorio de Vietnam fue dividido temporalmente en dos partes con la frontera demarcada con el paralelo 17. La base jurídica principal para esta situación radica en la conferencia de Ginebra sobre la recuperación de la paz en Indochina y el acuerdo del mismo nombre firmado el 21 de julio de 1954. En la última declaración de la reunión, las partes implicadas se comprometieron a respetar la independencia, la soberanía, la unificación nacional y la integridad territorial vietnamita. Sin embargo, en ese escenario, el Gobierno de la República de Vietnam gestionó temporalmente el territorio demarcado desde el paralelo 17 hasta el extremo Sur del país y el resto pertenecía a la administración de la República Democrática de Vietnam. Según lo establecido en dicho tratado, la República de Vietnam o Vietnam del Sur continuó implementando la soberanía nacional reconocida durante siglos en los archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa mediante los documentos administrativos y las actividades prácticas relacionadas. Por esta razón, numerosos combatientes de sus fuerzas navales se sacrificaron por la defensa de estos territorios isleños contra los invasores chinos en 1974. Además, debido a la ocupación por la fuerza de dichos conjuntos de islas, China infringió descaradamente las normativas internacionales y hasta la fecha, su presencia en el archipiélago de Hoang Sa no afirma su soberanía nacional sobre este territorio vietnamita.
Al echar una mirada retrospectiva a la historia, la entonces República Democrática de Vietnam, conocida como Vietnam del Norte no tuvo potestad de administración en el archipiélago de Hoang Sa ubicado al sur del paralelo 17 perteneciente a Vietnam del Sur. De esta manera, la misiva de 1958 es bajo la competencia de Vietnam del Norte. El contenido de la carta de Pham Van Dong refleja sólo el criterio político y las relaciones entre este país y China, así como afirma el reconocimiento y el apoyo del Gobierno a la declaración de Beijing que reclamó 12 millas náuticas de las aguas territoriales, pero nunca abandona la soberanía vietnamita sobre los dos archipiélagos de Hoang Sa y Truong Sa.