(VOVworld) – Una nueva primavera ha llegado a todo el país, desde las regiones montañosas hasta los territorios insulares remotos. En el archipiélago de Truong Sa (Spratly), el ambiente de recibimiento al Tet, Año Nuevo Lunar, ya está presente en todas las islas e islotes. La felicidad se percibe fácilmente en los rostros y vistas de combatientes y pobladores locales, quienes están disfrutando de diversos programas artísticos y culturales para dar la bienvenida al Año Nuevo del Mono.
Soldados en Truong Sa preparan Banh Chung, pastel tradicional que contiene arroz glutinoso, carne de cerdo y frijol verde
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El Tet en Truong Sa suele comenzar desde que los barcos transportan mercancías de primera necesidad desde tierra firme hasta este archipiélago. A partir de ese momento, los soldados acantonados en la isla, junto a los lugareños entran en la fase preparativa para el festejo de la mayor fiesta tradicional del calendario lunar. Las labores como cocinar el Banh Chung (pastel cuadrado de arroz que contiene frijol verde y carne de cerdo), pintar y decorar las viviendas u organizar las actuaciones artísticas se preparan detalladamente.
Vo Thi Thu Sang, residente en el pueblo de Truong Sa, compartió que en esta isla, pese a que el ambiente es menos bullicioso que en tierra firme, todos los habitantes perciben la solidaridad y el amor que el pueblo vietnamita entero les concede en ocasión del fin del año lunar.
El festejo del Tet en las islas lejanas ahora ya no es como antes. Aquí no falta nada. Junto a los bienes de primera necesidad enviados desde la parte continental, las autoridades de Truong Sa también prepararon suficientes alimentos para el recibimiento del Tet. Le Thi Truc Ha, ciudadana del pueblo, expresó:
“Gracias a la atención de las autoridades locales, en nuestra celebración de la mayor fiesta del calendario lunar ya no falta nada. Todos tenemos Banh Chung, carne de puerco, pollo, verduras y pescado, entre otros alimentos para consumir en la ocasión. Este año, también hacemos galletas y mermeladas”.
Para el presente Año Nuevo Lunar, el pueblo de Truong Sa tiene la suerte de recibir a visitantes especiales, que son cinco miembros del club “Juventud por el mar e islas de la Patria”. Por otra parte, los militantes de la Unión de Jóvenes comunistas Ho Chi Minh han preparado 2016 pasteles para mandar a los pobladores del territorio insular. Bui Thi Hong Duyen, habitante de la comunidad étnica Muong en la provincia norteña de Son La, integrante de dicha delegación juvenil, comentó:
“Este festejo del Tet es muy especial para mí. Tengo la oportunidad de compartir los momentos agradables con los soldados y compatriotas radicados en la isla. Es el Tet más significativo de mi vida”.
Combatientes interpretan canciones sobre la primavera y la Patria
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Desde la nochevieja, las actividades culturales, artísticas y deportivas en Truong Sa empiezan a desarrollarse. En la última noche del viejo año, funcionarios y pobladores del distrito insular participan en la velada de intercambio artístico y juegos en colectivos, y especialmente escuchan las felicitaciones del presidente Truong Tan Sang.
El acto más solemne y sagrado en los días del Tet es la ceremonia de saludo a la bandera nacional la mañana del primer día del calendario lunar. Los soldados vestidos de uniformes bien arreglados, junto a los ciudadanos, incluidos niños, se ponen de pie bajo la bandera. El canto del himno nacional se mezcla con el sonido del viento y las olas, creando así un eco que se extiende por todo el Mar del Este. Las melodías de la canción “Marchen al frente” representan la determinación de docenas de millones de connacionales radicados en la tierra firme de defender la estabilidad en estos territorios insulares de la Patria.
El coronel Nguyen Van Tuan, comisario político en Truong Sa, apuntó:
“El saludo a la bandera nacional en el Año Nuevo Lunar es un solmene acto para cualquier ciudadano vietnamita, especialmente cuando se celebra en el archipiélago Truong Sa, un territorio sagrado del país. Dentro de mí hay una emoción muy fuerte, una mezcla de orgullo y algo sagrado. Bajo la bandera nacional, deseo que los combatientes y habitantes de la isla tengan mucha salud y cosechen nuevos éxitos en sus misiones”.
Después de la ceremonia, los lugareños van a visitar las pagodas locales para orar por un año próspero, pacífico y feliz, y luego colocan inciensos en el memorial dedicado al extinto Presidente Ho Chi Minh y a los mártires de guerra.
En los primeros días del año nuevo, el pueblo de Truong Sa vive un entorno muy dinámico, gracias al desarrollo de las actividades deportivas y culturales. El teniente coronel, Do Hai Dang, comentó al respecto:
“En esta ocasión organizamos diversos eventos deportivos como el juego de la soga, fútbol y voleibol. Tratamos de crear un espacio en el que las unidades y pobladores compiten entre sí, mejorando a la vez sus condiciones físicas”.
Después de los días de festejos, funcionario y ciudadanos radicados en la isla vuelven a su vida habitual, empezando las nuevas jornadas de trabajo con nueva esperanza de prosperidad y felicidad. Pese a la distancia geográfica y otras diversas dificultades, los combatientes de Truong Sa siempre agarran con firmeza sus armas para defender la soberanía nacional y cumplir las misiones asignadas.