(VOVworld) – La guerra ha pasado hace más 40 años, pero sus consecuencias siguen golpeando a las personas expuestas al llamado agente naranja, de gran toxicidad por su alto contenido de dioxina. Sin embargo, pese a las dificultades en sus vidas cotidianas, estos vietnamitas todavía afectados no se dan por vencidos en la superación de las enfermedades. Tampoco están solos en esta lucha, porque además de sus familias, reciben el apoyo de la comunidad. Hay que destacar el papel de las asociaciones de víctimas de dicha sustancia tóxica que, en diferentes localidades del país, se esfuerzan codo con codo para ayudar a aliviar los dolores en aras de incorporarse a la sociedad. 

Thai Nguyen es una provincia pobre en una zona semi-montañosa al norte de Vietnam. Durante la guerra, más de 25 mil de sus habitantes se alistaron en el ejército nacional, y la mayoría de ellos estuvieron expuestos al agente naranja, transmitiendo enfermedades hereditarias a sus generaciones posteriores. Hasta la fecha, sólo 13 mil pacientes, entre ellos 11 mil directos, se benefician de los auxilios mensuales del Estado. Pese a las dificultades, durante los últimos cinco años, la administración provincial ha movilizado más de 30 mil millones de dongs (aproximadamente un millón 337 mil dólares) para apoyar a dichos enfermos. Según Hoang Duc, presidente de la Asociación de Víctimas del Agente Naranja/Dioxina de Thai Nguyen, los logros se deben principalmente a la abnegación de los miembros de la organización. Al respecto el dirigente reveló: “La calidad de los funcionarios es el factor decisivo de todas las actividades de la organización. En este sentido, buscamos a personas que tienen dignidad y están dispuestas a tomar acción para cumplir con eficacia las tareas. Por nuestra parte, ofrecemos cursillos regulares de reciclaje para los miembros de la asociación”.

La Asociación de Víctimas del Agente Naranja/Dioxina de Thai Nguyen ofrece exámenes médicos con la entrega de medicamentos gratuitos para las personas expuestas a esta sustancia tóxica en la localidad

Durante el tiempo de guerra, la provincia central de Quang Tri fue la zona desmilitarizada que más sufrió las secuelas de la dioxina arrojada por las tropas norteamericanas. En consecuencia, decenas de miles de personas fueron intoxicadas con esos defoliantes. Según los últimos datos, se registraron al menos 16 mil víctimas de dicha sustancia tóxica. Ante esta situación, durante años la Asociación de Víctimas del Agente Naranja/Dioxina de Quang Tri ha mantenido esfuerzos para aliviar los dolores de los pacientes. Aunque es una localidad pobre, los lugareños preservan la tradición revolucionaria cada vez que se promueven movilizaciones en apoyo a las personas expuestas al mencionado compuesto químico. Le Van Dang, presidente de dicha organización informó acerca del tema: “Gracias a la asistencia del Estado y a los benefactores, durante los últimos diez años la Asociación de Víctimas del Agente Naranja/Dioxina de Quang Tri ha movilizado más de mil 25 millones de dólares y obsequiado más de 30 mil regalos a las personas expuestas a esta sustancia tóxica. Priorizamos las familias con al menos dos víctimas. Además, donamos más de 150 sillas de ruedas y bicicletas, concedemos becas y ofrecemos exámenes médicos gratuitos a los pacientes. La administración provincial ha logrado el respaldo del gobierno alemán en particular, mediante el proyecto de construcción de un centro de cuidado y recuperación funcional para las víctimas de la dioxina”.

Acto de entrega de sillas de ruedas para niños expuestos a la dioxina en la provincia de Quang Tri

La provincia sureña de Tien Giang es otra localidad afectada severamente por los defoliantes de Estados Unidos. Allí, se registran 10 mil 200 personas intoxicadas por la dioxina, entre las cuales mil 820 tienen méritos revolucionarios. Hasta la fecha, las autoridades provinciales han apoyado enérgicamente a la Asociación local de Víctimas del Agente Naranja/Dioxina. Gracias a esta coordinación, durante la última década, la organización ha entregado más de 50 mil regalos y 11 mil porciones de alimentos, además de construir 330 casas de solidaridad para los enfermos necesitados.

Con el criterio “Unidad-Cariño-Responsabilidad por las Víctimas del Agente Naranja/Dioxina”, las asociaciones encargadas de esta labor de diferentes localidades han cumplido correctamente las tareas de apoyo a los pacientes. Sus buenos desempeños han contribuido a fomentar también la asistencia tanto de los extranjeros de origen vietnamita como de la comunidad internacional, para ayudar a las víctimas y facilitar su integración en la sociedad.