(VOVWORLD) - En los últimos años, la degradación forestal ha provocado la reducción creciente de alimentos y el hábitat de los elefantes en la provincia altiplana de Dak Lak, dificultando la preservación de este animal. Para solucionar este problema, las autoridades locales han adoptado numerosas medidas para garantizar la salud y la capacidad reproductiva de las manadas de paquidermos.
El ecosistema natural nutre los elefantes (Foto: Duong Giang) |
En la tarde, después de terminar un día enero transportando a turistas, Y Kham Sen, uno de los elefantes de la zona ecoturística de Ho Lak descansa bajo la sombra de los árboles y saborea su comida favorita, el tallo de banano. Su dueño Y Winh Êung reveló que antes dejaba descansar al animal en el bosque después de una semana de trabajo durante medio mes donde tenía que sobrevivir por su propia cuenta. Nacido en plena naturaleza salvaje, el elefante come principalmente hojas y plantas. Sin embargo, en los últimos años esta fuente de alimentos se ha reducido, por eso, tiene que buscar otras como maíz y caña de azúcar cuya cantidad es garantizada por las personas locales, salvo el valor nutricional. Entretanto, las variaciones climáticas que aumentan la temperatura y el crecimiento de la afluencia turística han debilitado a los paquidermos. Al respecto, Y Winh Êung dio a conocer: “Las selvas son la casa de los elefantes. Ellos comen mucho. Sólo un ejemplar puede consumir hasta 500 kilogramos de plantas al día. Sin embargo con la reducción de hojas y malas hierbas en los bosques, tenemos que alimentarlos con maíz y plataneros. Al parecer, esta receta es suficiente en cantidad pero en mi opinión, los elefantes serán más fuertes si buscan alimentos por su propia cuenta en la naturaleza”.
La escasez de alimentos y el ambiente inadecuado para vivir protagonizan el debilitamiento de los elefantes tanto domésticos como salvajes. Desde 2012 hasta la fecha, la provincia de Dak Lak ha registrado 10 cabezas muertas debido al envejecimiento, al cansancio y a los ataques de otros paquidermos que habitan en la selva. La localidad presencia también ataques de elefantes salvajes contra algunas áreas de producción de los habitantes y las empresas, provocando pérdidas materiales. La estadística del Centro provincial de Preservación de este animal reveló que en la actualidad, Dak Lak tiene 5 manadas salvajes compuestas por 80 o 100 mamíferos de este tipo que se concentran principalmente en los distritos de Buon Don, Ea Sup, Ea H’leo y Cu Mgar. Sobre la causa de los ataques antes mencionados, el director de dicho organismo, Huynh Trung Luan informó: “En su camino los elefantes salvajes encuentran sus comidas favoritas en algunos huertos. Razón por la cual ocurrieron esos ataques e incidentes con los dueños de estos campos. Además, su ecosistema se ha reducido por lo que acuden a las zonas residenciales donde suelen asaltar a los habitantes locales, perjudicando así la vida de los lugareños, la seguridad y la preservación de esos animales¨.
En 2014, la provincia de Dak Lak comenzó a desplegar el proyecto de preservación urgente de los elefantes con el financiamiento del centro antes mencionado. Después de 5 años, los expertos han implantado exitosamente un chip en cada paquidermo para gestionar su estado de salud y curar las enfermedades y las heridas si las detectan. Sobre la capacidad reproductiva, se confirmaron 8 aptos. Actualmente, se cuidan dos elefantes que fueron rescatados heridos de la selva.
El vicejefe del Departamento General de Silvicultura de Vietnam, Cao Chi Cong pronuncia su discurso en la conferencia (Foto: Pham Cuong/VNA) |
Según Cao Chi Cong, vicejefe del Departamento General de Silvicultura, es necesario construir zonas especiales para los animales con el apoyo de los organismos competentes y los habitantes locales en medio de la degradación forestal. En idéntico sentido señaló: “La calidad de las selvas de Dak Lak ha aminorado mucho en comparación con la de hace varias décadas. Antes la superficie forestal era de 200 metros cúbicos por hectárea pero en la actualidad esta cifra es de 100, limitando así la fuente de alimentos de los elefantes. De esta manera, tenemos que crear una zona donde cultivemos plantas y árboles adecuados para alimentarles. Concretamente, en la provincia de Dong Nai sembramos árboles mientras que en la provincia de Son La creamos un sistema de canales que recoge el agua de los arroyos a lo largo del camino al servicio de los paquidermos”.
Hasta la fecha, la provincia de Dak Lak ha planificado cerca de 175 mil hectáreas de preservación urgente de elefantes salvajes y 350 hectáreas para los domésticos. En medio de la grave degradación forestal, resulta trascendental la creación de un entorno favorable con suficientes fuentes de alimentos por el bien de los paquidermos y los habitantes locales.