(VOVworld) – Desde hace un mes, en Vietnam se realizan numerosas actividades de solidaridad con las personas en condiciones económicas difíciles en distintas localidades, en aras de garantizar a todos una celebración alegre del Año Nuevo Lunar (Tet). Visitas, entregas de presentes, camiones cargados de mercancías y ómnibus que llevan a trabajadores contratados en las grandes ciudades a sus lugares de origen… hacen acogedor el ambiente de la fiesta del Año Nuevo Lunar y al mismo tiempo enaltecen aún más lo hermoso de esta tradición nacional.

En la norteña provincia de Bac Kan hay unas 32 mil familias de escasos recursos, de ellas, muchas en condiciones extremas, adultos mayores solitarios y niños huérfanos. Para preparar obsequios por el Tet, el Frente de la Patria y la Cruz Roja de la localidad solicitaron apoyo a patrocinadores. Esa última organización preparó cerca de dos mil paquetes para pobladores de las minorías étnicas y zonas montañosas, así como personas pobres, según informó Nguyen Van Cuong, presidente de la Cruz Roja de Bac Kan. “Son muchos los necesitados en nuestra provincia. Hemos hecho todos los esfuerzos posibles para organizar actividades con vistas a movilizar recursos y preparar de cinco mil a siete mil paquetes de regalos por el Tet para ellos”.

La Cruz Roja del Hospotal Nhan Dan 115 otorga regalos a los enfermos de pocos recursos en ocasión del Año Nuevo Lunar

Mientras, Trinh Thi Tiep, presidenta de su Cruz Roja de la central provincia de Thanh Hoa, explicó que su institución ha desplegado desde principios de noviembre un plan para entregar unos 40 mil presentes por un valor total de más 16 mil millones de dongs, equivalentes a cerca de 707 mil dólares. “El movimiento de apoyo a los pobres y las víctimas del agente naranja de nuestra organización ha tenido efectos positivos. Las familias se mostraron felices al recibir obsequios, los cuales les animan mucho para saludar el advenimiento del Año Nuevo”.

En el ámbito nacional, la Cruz Roja de Vietnam promovió un Mes de Acción con el mismo propósito al aproximarse el Tet. Su vicejefa, Tran Thi Hong An destacó que esta es una novedad en relación con otros años y agregó: “Diversificamos también las entregas. Además de dinero y objetos, obsequiamos casas de solidaridad y tarjetas de seguro médico a los necesitados en esta ocasión. También realizamos consultas y tratamientos médicos gratuitos, entregamos ganado bovino y organizamos galas humanitarias en favor de los pobres en todo el país. Esperamos que este movimiento obtenga buenos resultados”.

Mientras, numerosos jóvenes se suman a las actividades de apoyo a los sectores de menos recursos de la población, como la elaboración de “banh chung” para los pobres. De este programa, mil pasteles tradicionales e igual cantidad de presentes fueron entregados a pobladores necesitados de las provincias de Dien Bien, Ha Tinh, Quang Binh y Quang Tri. Al respecto, Nguyen Thi Hang, integrante de la Unión de Jóvenes Comunistas Ho Chi Minh, dijo: “Este es un programa de gran significado. Aunque no pude entregar personalmente los “banh chung” que hice a los necesitados, deseo con todo mi corazón que tengan un Tet feliz”.

Jóvenes y militares elaboran pasteles tradicionales "banh chung" para entregarlos a los necesitados

En este movimiento participan también muchas empresas. Pham Thi Van Anh, presidenta del Gremio Sindical de la Compañía Canon Vietnam, de 22 mil trabajadores, informó que su entidad ha movilizado numerosos ómnibus para llevar a los obreros a sus pueblos a festejar el Tet con sus familiares y luego traerlos de regreso al trabajo. “Antes, el número de trabajadores que se incorporaban a las actividades productivas de la compañía después del Tet se estimaba en el 91 o 92 por ciento, pero con el nuevo programa de atención con ómnibus, esta cifra se elevó al 99,5 por ciento. Este es el mejor resultado que podemos esperar y es una de las actividades de gran significado y beneficio tanto para nuestros trabajadores como para su empresa”.

Ha Thi Sim, quien trabaja en la Sociedad Nisei Electric Vietnam, en el Parque Industrial de Thang Long, en Hanoi, es una de los miles de empleados que recibieron presentes por el Tet y boletos gratuitos de ómnibus para viajar a su tierra de origen. Ella expresó lo siguiente: “Me conmueven mucho todas estas atenciones. Me siento más segura y tranquila, sin temor ni preocupación de conseguir un boleto y un asiento cómodo en ómnibus para viajar a mi pueblo a festejar el Año Nuevo Lunar. También puedo llevar a mis hijos conmigo a casa”.

Las actividades de apoyo a los necesitados en ocasión del Tet se han convertido en movimientos de amplia participación de la sociedad. También demuestran la solidaridad de los vietnamitas y motivan a la gente a esforzarse por cumplir los objetivos en el nuevo calendario.