(VOVWORLD) - A diferencia de la tierra firme, el distrito insular de Truong Sa, de la provincia central de Khanh Hoa, celebró anticipadamente el Tet 2019 (Año Nuevo Lunar del Cerdo) después de recibir los presentes, alimentos y víveres llevados por los buques de transporte. En esta ocasión, los soldados y pobladores locales disfrutaron la tradicional fiesta de Vietnam con alegría y unidad.
Pese a estar ubicado lejos de tierra firme, el distrito de Truong Sa, perteneciente al archipiélago homónimo denominado internacionalmente como Spratly, celebró la nueva primavera con abundantes provisiones de los artículos típicos de esta época del año, tales como el “bánh chưng” (pastel de arroz glutinoso con carne de cerdo y soja verde), árboles de naranjo enano y ramas de melocotonero con flores, símbolos de la Fiesta del Tet tradicional de Vietnam. El 29 y el 30 de diciembre de 2018 según el calendario lunar, las mismas curtidas manos con que los soldados empuñan las armas para defender la soberanía nacional, empaquetaron y cocieron el “bánh chưng”. Alrededor de la hoguera que calentaba la olla de estos pasteles, los soldados y lugareños cantaron acompañados de instrumentos musicales, principalmente guitarras, animando el ambiente festivo de la Nochevieja.
Soldados en la isla Truong Sa Lon cuecen el "bánh chưng" para celebrar el Tet 2019 (Foto: baodienbienphu.info.vn) |
En ese momento sagrado, Tran Quoc Tuong, quien asumía la misión en la isla de Da Lon A, dijo lo siguiente: “En ocasión del Tet, nuestros compañeros se reúnen en el enclave para charlar y cantar. Los comandantes nos garantizan los materiales necesarios para celebrar la fiesta con júbilo. Cuando llegué por primera vez a este lugar, me sorprendió el empaquetamiento del ‘bánh chưng’ con hojas del árbol barringtonia asiática en lugar de las tradicionales. Aquí se aprovechan todos los objetos disponibles para la vida cotidiana debido a la escasez de muchas cosas”.
La isla de Sinh Ton tuvo el ambiente festivo más dinámico con carteles de felicitación del Año Nuevo Lunar del Cerdo en los estrechos senderos. Entretanto, los árboles artificiales de Ochna integerrima elaborados con ramas de “phong ba” y colocados en los puestos de concentración militares mostraban sus flores amarillas con luces intermitentes. Mientras, en la fachada de cada vivienda resaltaban las macetas de naranjo enano pequeño, regalos de los compatriotas residentes en la tierra firme. El primer capitán Tran Van Duong, soldado estacionado en la isla de Sinh Ton expresó: “La unidad entre los combatientes y los habitantes me ayuda a aliviar la nostalgia. Elaboramos juntos el ‘bánh chưng’ y disfrutamos del ambiente del Tet”.
La fiesta más animada en Truong Sa fue la gala de la Nochevieja. En medio de murmullos de vientos y olas, las voces de los combatientes y lugareños acompañaban a los ritmos melodiosos de las guitarras, acercando a los compatriotas. El teniente coronel Tien Quang Su, comisario político de la isla de Phan Vinh informó: “La gala y las actividades culturales y deportivas en los días del Tet diversifican la vida espiritual de los compatriotas. Especialmente en el momento de transición entre el año que termina y el advenimiento del siguiente, somos conscientes de empuñar las armas para defender la soberanía sagrada de la patria”.
Durante el Tet, los vietnamitas tienen la costumbre de acudir a los lugares de culto para pedir la tranquilad y salud durante el año. La campanada de la pagoda da la señal de la llegada de la nueva primavera en el país y el distrito de Truong Sa, en particular. Aunque están lejos de la tierra firme, los soldados y pobladores locales no escatiman los esfuerzos para mantener la unidad a fin de superar las dificultades y defender los territorios sagrados de la patria.