(VOVworld) – Vietnam cuenta con un gran número de fiestas, la mayoría de ellas se llevan a cabo en la primavera. En este espacio, abundaremos sobre los esfuerzos del país indochino para preservar los valores culturales nacionales en las festividades tradicionales.
Según estadísticas del Ministerio de Cultura, Deporte y Turismo, existen en Vietnam unas ocho mil fiestas, de ellas siete mil populares, 330 relacionadas con personajes y eventos históricos, más de 540 religiosas y 10 incorporadas del exterior. La celebración de estas actividades con la amplia participación del pueblo en casi todas las localidades ha contribuido en gran medida al intercambio e integración del país con las otras culturas del planeta, pero al mismo tiempo, ello implica la necesidad de conservar la identidad nacional. El ministro Nguyen Ngoc Thien destacó: “Organizamos los festivales y fiestas con el objetivo de atraer más visitantes. Pero al mismo tiempo, debemos prestar mayor atención al cuidado y a la promoción de las tradiciones arraigadas del país en esos festejos. Este trabajo debe realizarse en correspondencia con nuestros tiempos, es decir en el contexto de la integración global. La cultura también necesita avanzar sin perder en este proceso sus rasgos más hermosos”.
Un rito tradicional en la festividad Minh The, en la aldea de Hoa Lieu, ciudad de Hai Phong (Foto: My Tra)
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Lo que atrae a la gente a un festival es la celebración en su marco de actuaciones artísticas, juegos populares y competiciones deportivas. Por un lado, animan el ambiente y entusiasman a los participantes, y por el otro, contribuyen a preservar los valores culturales de las naciones de procedencia. El éxito de una fiesta se debe a que logra resaltar el apego de la misma a sus raíces y a que cuenta con la participación activa y creativa de la población. Al respecto, el profesor adjunto y doctor Dang Van Bai, vicepresidente de la Asociación de Patrimonios Culturales de Vietnam estimó: “Las fiestas tradicionales son espacios culturales donde podemos resaltar la tradición de gratitud a los antepasados y recordamos nuestras raíces. Creo que la educación de los patrimonios nacionales debe ser un programa nacional, a través del cual exaltamos los brillantes ejemplos de la Patria y contribuimos a impedir las muestras de degeneración moral y la erosión de la identidad nacional en el proceso integracionista”.
En el Festival Lim en la provincia de Bac Giang, los visitantes y pobladores locales pueden participar en diversos juegos populares (Foto: My Tra)
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Las actividades, aspiraciones y los talentos del pueblo se reflejan en las fiestas, pero a la vez, mediante estas la población puede disfrutar de la cultura nacional del modo más innovador. Pham Thi Lan Anh, jefa de la Sección de Gestión de Patrimonios de la Dirección de Cultura, Deporte y Turismo de Hanoi comentó: “Para poner en alto los valores culturales de las fiestas en la vida, es necesario aumentar la propaganda, especialmente a través de los medios de comunicación masiva a fin de sensibilizar al pueblo sobre su importante papel en esta labor. De esa forma, tendrá mayor conciencia de su responsabilidad en la conservación de la identidad cultural nacional y el estilo civilizado de participación”.
Vietnam cuenta con 54 grupos étnicos y cada uno tiene diferentes festividades que representan su idiosincrasia y particularidades culturales. La organización con eficiencia de los festivales tradicionales, que se transmiten de generación en generación en Vietnam, es también una de las mejores maneras para promocionar las ventajas turísticas de las localidades y del país en general, e igualmente impulsar el intercambio cultural entre Vietnam y los otros países del mundo.