(VOVworld) – La aldea de Dong Xam, en la provincia de Thai Binh es muy conocida en toda la región norteña de Vietnam por su oficio tradicional de platería y sus talentosos artesanos. Es más, su rico acervo cultural preservado durante cientos de años de historia maravilla a cualquier persona que se encuentra en esta tierra apacible.
El villorrio tradicional de platería, perteneciente a la comuna de Hong Thai, se sitúa a 10 kilómetros del centro de la cabecera distrital de Kien Xuong. El pequeño camino que conduce a la aldea está al lado de un río tranquilo y romántico. El ambiente campestre viene a ser muy agradable para los sentidos de los pasajeros.
El templo de veneración al fundador de la platería en la aldea Dong Xam
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Los visitantes pueden pasar ante todo por el templo de Dong Xam, lugar de veneración al señor Nguyen Kim Lau, quien tuvo el mérito de crear la platería y enseñarla a los pobladores. Se trata de un complejo arquitectónico imponente y soberbio, ubicado en el centro de la aldea. Sus 12 obras con 40 locales fueron construidas en una extensión de mil metros cuadrados.
Al referirse a la historia y la arquitectura de este santuario, su conserje Nguyen Xuan Ngan, dijo: “Anteriormente este templo era de menor tamaño pero con una estructura preciosa cubierta de tejas mixtas. Cuando Thai Binh se estableció como provincia, este templo fue sometido a una remodelación integral para llegar a ser el complejo que hoy tenemos, más grande y hermoso. Han transcurrido más de cien años desde entonces”.
Artesanas están enfrascadas en su labor
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Hablando del oficio tradicional de Dong Xam, la reputación de sus productos sofisticados y de sus ingeniosos artesanos ha volado muy lejos en el país. El legado profesional ha sido cuidado por los aldeanos de diferentes generaciones como el tesoro común. En los últimos años, para crear más empleos a sus fuerzas laborales y responder a las demandas del mercado, no solo trabajan la plata sino otros metales, sobre todo el cobre. Entre los artículos fabricados de este material se pueden mencionar bandejas, pinturas, objetos de culto y figuras de animales sagrados.
En medio de los sonidos de tallado sobre metales, Pham Van Tu, platero local compartió: “Mi familia ejerce este oficio desde el tiempo de mi abuelo paterno. En los meses de junio y julio no estamos muy ocupados, pero a principios y finales del año tenemos muchos pedidos. Nuestros productos sirven para el culto, la ornamentación del interior y de regalos también. Los secretos de la profesión se guardan y transmiten solamente entre los artesanos y sus familias. Podemos llegar a identificar a simple vista los artículos creados por nuestra localidad”.
Algunos productos de culto creados en la aldea de Dong Xam
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En esta aldea reinan por todo el día los ruidos producidos durante los procesos del trabajo de la plata y el cobre. Es impresionante observar los ágiles movimientos de las diestras manos para dar a luz obras de alto valor estético. En su taller, la señora Nguyen Thi Nga reveló lo siguiente: “Mis hijos y yo nos encargamos solamente de la impresión entre muchos otros pasos como la creación de relieves, el teñido, el pulido de las piezas y por último allanarlas antes de enmarcarlas. Los jóvenes asumen las labores más fáciles y las personas mayores, las que requieren de mayor habilidad y técnica”.
Tung Chi, una hija de Thi Nga, comienza la práctica con su mamá en el taller familiar. La debutante participa en las tareas más sencillas. Ella dejó saber: “Mi madre se ha dedicado a este trabajo desde hace 20 años. Los pedidos vienen de modo regular y nos dan bastante sustento. Seré estudiante de último grado de la escuela preuniversitaria este año pero aprovecho las vacaciones de verano para ayudar a mi mamá”.
Estar en la aldea de platería tradicional de Dong Xam descubriendo la entrega con la que cada artesano labora y apreciando sus delicados productos en un ambiente afable de cientos años de cultura promete ser una experiencia memorable.