(VOVworld) – Ante los ojos de los turistas, el encanto de Ha Giang, una provincia del extremo del Norte de Vietnam, no sólo se constituye por sus lugares turísticos atractivos, sino también por la experiencia que brinda a los visitantes a ella. Al hacer una excursión por allí, los viajeros bajarán a rutas para atravesar los valles, luego subirán por caminos sobre las montañas en los cuales sentirán que pueden tocar el cielo, además de sentir que su corazón se detiene en las curvas que se inclinan sobre los abismos.

El "Camino de la Felicidad"

Los amantes de viajes de aventura deben pasar por las vías en Ha Giang. La provincia está a más de 320 kilómetros de la capital Hanoi. La carretera que une los dos puntos está en excelentes condiciones. Sólo lleva 5 horas en coche ir desde Hanoi hasta Ha Giang. Al contrario, desde el centro de Ha Giang a sus distritos montañosos de Quan Ba, Yen Minh, Dong Van y Meo Vac, la distancia solo es de 200 kilómetros, pero lleva a los viajeros todo un día para llegar. Para alcanzar dichas comunas, se toma la Ruta Nacional 4C, llamada por los locales “Camino de la Felicidad”. Al principio, la ruta es bastante recta. A un lado, casas y campos de maíz al horizonte. Al otro lado, un arroyo sinuoso. Todo genera un paisaje pintoresco, pero un poco después, la vía comienza a hacerse más elevada al subir las montañas. Siguiendo este camino, se atraviesa el paso de Bac Sum para llegar al distrito de Quan Ba, donde se sitúa las montañas gemelas de Co Tien (Hadas). Tras Quan Ba, encontramos el distrito de Yen Minh. Desde allí hasta la meseta de Dong Van, la ruta se torna cada vez más peligrosa y difícil de cruzar. Tuong Vy, directora de la Sociedad de Responsabilidad Limitada ATA Vietnam y excursionista de Ha Giang, dio a conocer que los caminos en este tramo son pequeños y con curvas, con el abismo a un lado y el acantilado al otro. Sin embargo, desde allí podemos contemplar desde arriba un panorama majestuoso de montañas rocosas. Compartió a nosotros su experiencia: “Nuestro grupo ha tardado dos días en atravesar los caminos montañosos de Ha Giang. El primer día no encontramos mucha dificultad, y así pensamos que tampoco habría muchos obstáculos el siguiente día. Pero la experiencia con las curvas y las espirales del segundo día nos cambió totalmente la perspectiva. Continuamos subiendo y luego bajando. La ruta está llena de curvas peligrosas pero a mí me gusta lo desafiante de esos tramos. Y cuando pasé por allí, no sólo pude observar la belleza de las terrazas de arroz, también sentí que me superé a mí misma.”

Esas curvas son muy atractivas a los amantes de viajes de aventura

Al final de la carretera 4C se llega al paso de Ma Pi Leng, el más accidentado ubicado en Meo Vac, última comuna de Ha Giang luego de atravesar Quan Ba, Yen Minh y Dong Van. “El Camino de la Felicidad” es de unos 200 kilómetros y fue construido durante 6 años, desde el año 1959 hasta 1965, con un total de más de 2 millones de jornadas laborales prestadas por miles de jóvenes voluntarios provenientes de 16 etnias en 8 provincias norteñas vietnamitas. El tramo del paso de Ma Pi Leng, de 20 kilómetros, fue elaborado durante 11 meses, gracias a los esfuerzos de los jóvenes voluntarios al colgarse en peligrosas escarpaduras para colocar minas y sacar cada piedra utilizando herramientas muy simples como palancas y picos. La carretera actualmente desempeña un papel importante en conectar a más de 80 mil pobladores étnicos Mong en dichos 4 distritos remotos de la vida en la llanura. Tuong Vy expresó: “Al principio no sabía que esta carretera tenía otro nombre que es “Camino de la Felicidad”. Pero en realidad, cuando pasaba por aquí yo misma la denominé Felicidad. Eso se debe a los muchos paisajes hermosos que vi al pasar por ella, los que me generaron impresiones inolvidables, a pesar de la dificultad y el peligro que tiene.”

El paisaje de Ha Giang visto desde lo más alto del paso de Ma Pi Leng

Desde el paso de Ma Pi Leng, que cuenta con una altura de hasta 2 mil metros sobre el nivel del mar, los turistas quedarán boquiabiertos ante la hermosura impresionante de las montañas y los bosques de la zona noreste de Vietnam. Abrirán sus ojos a un paisaje del cielo y la tierra que se mezclan, y sobre esa escena destacan el río de Nho Que serpenteando como una cinta de seda. Mai Huong, guía turística de la agencia VietSense Travel, manifestó: “Me sentí muy conmovida ante el panorama magnífico del lugar. La presencia del río de Nho Que entre las montañas rocosas crea el carácter atractivo del paso de Ma Pi Leng que nunca podríamos encontrar en otro sitio. Allí, nos sentimos muy pequeños ante la grandiosidad de la naturaleza.”

Descubrir el “Camino de la Felicidad” para llegar al paso de Ma Pi Leng nos hace admirar las maravillas de la naturaleza y apreciar más la vida.