(VOVWORLD) - Para los vietnamitas el festival “Thanh minh”, también conocido como “Festival de los Difuntos”, es una actividad de suma importancia que honra a los fallecidos y a los ancestros. Al igual que la mayoría Kinh, los Dao lo realizan el quinto día del tercer mes lunar, que este año cae el 5 de abril. Durante este período, esta comunidad minoritaria acude al cementerio para limpiar y embellecer las tumbas de sus difuntos, orando por una vida pacífica y una abundante cosecha.
Los Dao se dividen en varios subgrupos y cada uno conmemora esta efeméride de una manera diferente. Los Dao Quan Chet, que residen principalmente en las provincias del norte de Tuyen Quang, Hoa Binh y Vinh Phuc, tienen una práctica particular. En esta comunidad, es el jefe de cada linaje familiar el responsable de elegir un día propicio para realizar los ritos funerarios de todos. Sin embargo, este día no debería corresponder a ninguna conmemoración de muerte de una persona en la familia. Una vez fijada la fecha, el cabeza de familia suele invitar a dos chamanes con un apellido diferente al suyo para realizar las ceremonias.
Un chamán practica rituales frente a la bandeja de ofrendas. (Foto: Diem Quynh)
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Las ofrendas para los ritos funerarios de los Dao Quan Chet incluyen alcohol, carne y tortas de arroz, así como dos tipos de dinero votivo, uno en papel blanco que simboliza la moneda ordinaria para gastos corrientes y el otro en papel amarillo que simboliza el oro. Según la creencia, este grupo étnico tiene el deber de venerar a todos sus antepasados, incluso a aquellos que datan de hace miles de años y cuyas tumbas ya no son visibles. Los chamanes, por lo tanto, queman más dinero votivo para estos ancestros cuyas tumbas no conocen, para que ellos puedan usar este dinero para financiar la restauración de su lugar de descanso final.
Los Dao Quan Chet tienen otra peculiaridad en su forma de celebrar la fiesta de los difuntos. En efecto, cuando levantan el altar de los antepasados, ofrecen una gran cantidad de camarones y pescados. Según la creencia local, cuantos más camarones y pescado se ofrecen, más beneficioso es para los antepasados. Trinh Tien Xuan, un étnico que vive en el distrito de Yen Lap, provincia norteña de Phu Tho, explicó lo siguiente.
“El festival de los difuntos es ocasión para que los descendientes expresen la gratitud hacia sus antepasados, por lo que la bandeja de ofrendas debe tener muchos camarones y peces. Lo importante es lavarlos bien y presentarlos bien. También se pueden cocinar previamente al gusto porque después de la ceremonia estas ofrendas se sirven a todos los miembros de cada familia”.
En cuanto al grupo minoritario Dao Khau, que reside en Sin Ho, en la provincia norteña de Lai Chau, estos tienen una clara distribución de tareas para su celebración de la fiesta en homenaje a los muertos. En particular, los hombres se encargan de comprar papeles de cinco colores con los que confeccionan banderas para plantar en las tumbas durante la celebración. A su vez, las mujeres son las encargadas de las ofrendas y la cocción, que van desde la fermentación alcohólica hasta la elaboración del arroz glutinoso y la preparación de las tortas de de este cereal.
El día de la visita de las tumbas, que normalmente se realiza del primer día al 22 del tercer mes lunar, la etnia Dao Khau trae al cementerio picos, palas y cuchillos para cortar la hierba y restaurar las tumbas, antes de colocar las ofrendas. Luego, deben regresar directamente a sus hogares, sin rodeos, con la esperanza de que sus ancestros los cuiden durante todo el año. Según la tradición de los Dao Khau, las niñas tienen derecho a venerar a sus padres muertos, pero los niños tienen el deber de venerar a todos sus antepasados. Por eso, la fiesta de los difuntos es una gran oportunidad para que este pueblo se reencuentre, como lo dijo Cheo Lieu Pao, un étnico de Dao Khau que reside en Lai Chau, al expresar: “Es una celebración alegre, ya que propicia una oportunidad para que toda la familia se reúna y rinda homenaje juntos a nuestros ancestros y nuestros orígenes. Es una tradición que absolutamente queremos preservar”.
Los Dao Tien con el pañuelo blanco son un grupo minoritario que festeja esta fecha. Según su leyenda, eran un pueblo migrante. Sin embargo, los primeros migrantes viajaron tan lejos de su lugar de origen que el día que murió su padre no pudieron regresar a tiempo para observar el duelo adecuadamente. Por eso, en esta comunidad, las mujeres siempre usan un pañuelo blanco en la cabeza en señal de luto. Esta es también la razón por la cual los Dao Tien no visitan las tumbas durante la fiesta de los muertos, pues para ellos, el culto a los ancestros se practica dentro de la familia y de acuerdo con las costumbres que se arraigan de generación en generación.
El festival de los muertos tiene un buen significado en la vida espiritual de los étnicos Dao, quienes sin importar donde vivan, han tratado de mantener esta costumbre de generación en generación, enseñando siempre a hijos y nietos sobre la raíz y el vínculo solidario entre familias y pueblos.