(VOVworld) - La casa-jardín constituye un emblema original de la arquitectura de la antigua ciudad imperial de Hue. Su encanto yace en la armonía entre hombre y naturaleza. Estos inmuebles son preservados cuidadosamente junto a los valores culturales de la otrora capital del país. Desde hace 10 años, ante la creciente afluencia turística, la provincia central de Thua Thien-Hue aceleró la promoción de sus patrimonios, convirtiendo sus casas-jardines en un espacio preferido por muchos turistas. Entre el bullicio de la vida urbana, estas quintas de Hue guardan antiguas y preciosos valores culturales en un ambiente apacible. Ahora, visitaremos la casa-jardín An Hien.
Tras descubrir los sitios más conocidos de Hue, como el Palacio real, las tumbas de los reyes, la pagoda de Thien Mu y el río del Perfume, a los turistas les sorprende la belleza sencilla y antigua de la casa-jardín An Hien, la más famosa entre las 800 diseminadas en esta ciudad.
La entrada de la casa-jardín de An Hien
Entre la ligera bruma de una tarde invernal, los turistas se maravillan ante el verdor del jardín. La casa conserva todavía sus espacios arquitectónicos originales, con un portón principal curvo de ladrillo, pintado de color ceniza, un biombo adornado con la letra "thọ", que significa "longevidad", y dos pasillos. Un sendero con filas de ciruelas a sus dos lados les conduce a un lago rodeado por flores de todo tipo: rosas, jazmines blancos y lirios… Además, el jardín destina un espacio especial a diversas especies de orquídeas multicolores. El verdor fresco y el sereno aroma de las flores tranquilizan el alma, una paz que solo da la naturaleza. La señora Kobayashi Akilo, especialista de la Agencia Japonesa de Cooperación Internacional (JICA), lleva 10 años en Hue. Pese a conocer bastante esta ciudad, siempre se emociona cada vez que visita esta casa.“Esta casa es una arquitectura antigua y típica de Hue, con sus pilares de madera. El jardín es muy lindo y natural. Es un rasgo arquitectónico singular de esta ciudad. Algunos amigos vietnamitas que tienen casas-jardines nos invitan de vez en cuando, y siempre acudo fascinada. Me encanta el aire puro, el sosiego y la comodidad que uno siente al entrar en esas casas-jardines.”
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El biombo adornado con la letra “Tho” (longevidad)
An Hien es considerada la mejor casa-jardín antigua de Hue, con vista al poético río del Perfume. Su arquitectura presume de una armonía perfecta. Los visitantes sienten el regocijo del paisaje, pero también de los conocimientos compartidos por la señora Nguyen Thi Thach, intendente de esta casa desde los 16 años de edad, hasta ahora que pasa a los 50 años. La señora Thach informó:
"An Hien significa Casa de la Paz. Fue construida en 1895 en una extensión de cerca de 5 mil metros cuadrados y ahora es símbolo de Hue. Durante sus 117 años, la casa aún se mantiene casi intacta, salvo los techos que recientemente fueron restaurados. En el jardín hay árboles frutales de las tres regiones de Vietnam -Norte, Centro y Sur- ricos en mangostán, sapote, lichi y pomelo, etc..."
El interior de la habitación central destinada al culto a los antepasados
La casa An Hien tiene tres cuartos al centro, y dos a sus lados. Los detalles en madera fueron tallados minuciosamente. La decoración interna muestra un gusto delicado. En la habitación central de la casa se encuentra un altar para rendir tributo a los antepasados de la familia y para ofrecer alojamiento a los huéspedes. La señora Thach continuó su presentación: "En Hue llamamos a estas casas "nhà rường", que significa casa de los pilares de madera. No se utilizan ni clavos ni cemento. Son ajustes de trancos. Los pilares son hechos de árboles de yaca silvestre, las paredes son de ébano. En las casas reales todo fue construido con ébano, y las viviendas de los mandarines, con pilares de yaca. El tejado tiene 5 capas yin- yang, que nos da fresco en el verano y calor en el invierno. La habitación central es reservada a la práctica del culto budista y adoración a los antepasados. Las mujeres no deben pasar frente el altar, tienen que dar la vuelta por los servicios. Los cuartos a ambos lados están para el dueño y sus hijos varones, las mujeres deben dormir en las habitaciones inferiores. Las parejas recién casadas también deben dormir en las habitaciones de abajo. La sala principal de arriba solo es para el señor y el hijo mayor."
Observando las casas-jardines de Hue, podemos adivinar el carácter de sus dueños. Estas casas demuestran una búsqueda de armonía entre el hombre y la naturaleza, entre la vida material y espiritual, todo se complementa, en pos de un equilibrio de la vida. Por eso, tras visitar las pagodas, palacios y tumbas reales en Hue, escuchar su música típica y degustar sus comidas con mucho picante, para terminar de conocer mejor a los habitantes locales solo falta un recorrido por las casas-jardines antiguas de esta ciudad. Descubrir las casas jardines en Hue es percibir el alma, la cultura y las características de esta antigua capital de Vietnam./.