El presidente Ho Chi Minh (Foto documental)

En los últimos años, el estudio y seguimiento de la ideología, la ética y el estilo de vida de Ho Chi Minh han evidenciado el respeto y la confianza de cada vietnamita en la causa revolucionaria que legó el tío Ho.

Enseñanzas de moralidad, valentía y responsabilidad

En su testamento, el eminente líder revolucionario señaló las tareas que debían cumplirse después del triunfo de la Revolución, sobre todo la preservación de la pureza de la militancia partidista. Al cumplir esas enseñanzas, el Partido Comunista de Vietnam ha adoptado medidas integrales y sincrónicas para fortalecer la construcción y consolidación del aparato partidista, incluso mediante sanciones severas a los funcionarios y militantes del Partido que violen la disciplina de la organización.

Trabajar en ese espíritu, ser moral, llevar un estilo de vida decente, ser valiente y responsable ante las tareas asignadas, es la única manera de ser verdaderamente fiel a los ideales revolucionarios que inculcó Ho Chi Minh y que ahora cultiva el Partido. Nguyen Manh Hien, secretario del Comité partidista de la provincia norteña de Hai Duong, opinó: “Para mí, las palabras deben ir de la mano con las acciones. Necesitamos poner a la cabeza los intereses comunes, tanto en el trabajo del personal como en su ejecución práctica. Cada miembro del partido debe poner el pensamiento y la acción a favor del desarrollo común, lo que nos ayudará a construir un aparato partidista cada vez más poderoso”.

Responsabilidad de ser ejemplares

La obligación de los funcionarios de ser ejemplares, especialmente los de alto nivel, constituye una premisa irrenunciable en la construcción del Partido. Estos deben desempeñar un papel pionero y ejemplar en todos los trabajos y reforzar la solidaridad interna dentro de su organización. Este factor también les ayuda a prevenir posibles errores. El profesor adjunto y doctor Nguyen Trong Phuc, de la Academia Política Nacional Ho Chi Minh, afirmó: “Creo que, si cada militante partidista cumple con determinación su responsabilidad, podemos lograr positivos cambios, especialmente en las labores relativas a la gestión del personal y control de poderes”.

El ejemplo y el estilo de vida del presidente Ho Chi Minh son una fuente de profunda inspiración para la formación de los funcionarios y de los ciudadanos vietnamitas en general. Gracias a ese legado que ya cumple cinco décadas, el Partido Comunista de Vietnam ha logrado positivos resultados en su misión de liderar al país hacia el progreso, hacia el futuro.